La NVIDIA GeForce GTX 650 Ti es el último lanzamiento de la marca el cual se centra en el nicho de los $150 dólares, representando una oportunidad de actualización para los que no requieren mucho poder en el departamento de gráficos pero igual quieren tener la oportunidad de correr los últimos títulos de videojuegos.
Y es que según el top 10 de tarjetas de video de los usuarios de Steam en Noviembre de 2012, por lo menos hay 6 que la 650 Ti puede batir fácilmente con la ventaja de tener un precio atractivo para el bolsillo y NVIDIA quiere llegarle a ellos con esta nueva propuesta.
La tarjeta
En nuestra unidad de pruebas contamos con un diseño estándar de NVIDIA, el cual no dista mucho de la mayoría de diseños comerciales propuestos por los fabricantes. Las dimensiones son muy condescendientes con torres pequeñas, solo mide 14.35 centímetros de largo y ocupa una sola ranura en el chasis.
Uno de los puntos fuertes de la arquitectura Kepler es la reducción en consumo de energía en sus chips, característica que podemos apreciar en la GTX 650 Ti. En condiciones normales de uso la tarjeta consumiría un máximo de 110 watts. Es necesario contar con un conector de poder PCI-e de 6 pines y una fuente de mínimo 400 watts (capacidad recomendada por NVIDIA).
Viene con 768 núcleos CUDA y 4 unidades SMX. El subsistema de memoria consiste en 2 controladores de 64 bits para un total de 128 bits y 1GB de memoria GDDR5. El reloj de la GPU está situado a 925MHz sin GPU Boost. La memoria corre a 5400MHz.
El ventilador es muy silencioso y cumple a perfección su tarea de mantener la tarjeta en los 32ºC en reposo. A la hora de trabajar, pudimos ver temperaturas de hasta 65ºC e incluso 70ºC en algunas escenas de los juegos más exigentes a nuestra disposición, bastante fresco si lo comparamos con arquitecturas anteriores.
En algunas configuraciones de los fabricantes encontraremos versiones con más memoria subiendo hasta los 2GB y diferentes opciones de ventiladores y disipadores que muy seguramente seguirán manteniendo la tarjeta relativamente fría para el rendimiento ofrecido.
La unidad de pruebas cuenta con dos salidas DVI y un mini-HDMI. Sin embargo, el chipset soporta hasta 4 monitores permitiendo que algunos fabricantes hayan optado por brindar las 4 salidas de video en las variantes de sus tarjetas.
Competencia
Aunque la GeForce GTX 650 Ti cuenta con el mismo chipset que la GTX 660, NVIDIA desactivó algunas funcionalidades del mismo para posicionarla correctamente en la familia. Estos cambios en la configuración del chipset GK106 hacen que la GTX 650 Ti consuma menos energía a cambio de, entre otras cosas, un 40% menos de ancho de banda de memoria que su hermana mayor. Esto principalmente penaliza el rendimiento a altas resoluciones si lo comparamos con la GTX 660 sin que esto signifique que el rendimiento en una resolución de 1920x1080 sea inaceptable con la GTX 650 Ti. Y a pesar que para las GeForce de la serie x50 Ti los 1680x1050 siempre ha sido la resolución óptima para trabajar, con las últimas tarjetas de esta serie se notan algunos esfuerzos para cerrar la brecha con los 1920x1080 que sigue liderando como la resolución más popular en los computadores de los jugadores hoy en día.
Sin embargo, al mirar hacia atrás, la historia cambia. Pudimos observar que una GTX 470 logró un rendimiento similar al de la GTX 650 Ti, claro está, con el doble del consumo de energía.
Su antecesora natural, la GTX 550 Ti, obtiene un buen reemplazo con la GTX 650 Ti cuyos beneficios se pueden notar gracias a que esta última cuenta con el mismo precio al público con que se lanzó la 550 Ti hace un año y medio y adicional viene con todo lo que la arquitectura Kepler tiene para ofrecer, incluyendo una mejora en el rendimiento general de la tarjeta y la adición de tecnologías de anti-aliasing exclusivas de la nueva familia de tarjetas de video NVIDIA.
Público objetivo
Hay que tener claro el público a quien la tarjeta está orientada. La resolución óptima sigue siendo alrededor de 1680x1050. Sin embargo, en los momentos en donde utilizamos la tarjeta para correr los títulos que jugamos diariamente, lo hicimos a una resolución de 1920x1080 y pudimos hacerlo sin problema. No se debe satanizar la tarjeta si nuestro monitor es de una resolución más alta que la recomendada por NVIDIA. Los juegos y las aplicaciones funcionarán correctamente, solo que en algunos casos -no en todos- se deberá sacrificar algo de calidad gráfica para que se ejecuten a una velocidad con la que estemos a gusto.
Además de todo el tema con la resolución óptima de la GTX 650 Ti, está el tema de los requerimientos con los que debemos contar para instalarla en nuestro computador. Esta es una tarjeta muy condescendiente con la energía que necesita para funcionar (400 watts reales en nuestra fuente de poder) y con el espacio requerido en la torre. En nuestra opinión esto es de especial importancia porque la mayoría de computadores nuevos podrían aceptar esta tarjeta sin ningún problema, incluyendo algunos de marca, los cuales son los que mayor desafío presentan a la hora de quererlos actualizar.
Todo esto nos deja claro que la GTX 650 Ti está orientada a jugadores no muy exigentes con el rendimiento o incluso con la calidad de imagen de los juegos que ejecutan porque si quisieran aprovechar al máximo las bondades gráficas de los últimos títulos o las nuevas tecnologías en filtros y juegos en 3D que ofrece NVIDIA tendrían que decidirse por una de las soluciones más potentes que tiene a disposición la marca.
Conclusiones
Comúnmente uno busca ganar más rendimiento en aplicaciones 3D a la hora de querer actualizar una tarjeta de video por lo que si tuviéramos una tarjeta de alta gama pero de una o dos series pasadas, posiblemente no ganaríamos mucho con esta nueva oferta de NVIDIA. Pero si nuestras prioridades son un computador más silencioso y que requiera menos refrigeración o disfrutar las nuevas características de DirectX 11.1 es válido mirar a este nuevo contrincante como una opción a escoger, incluso viniendo de una tarjeta de mayor gama.
Otra sería la historia si nuestra tarjeta actual tuviera más de 3 años de lanzada al mercado, situación en la que, aparte de contar con las ventajas en calidad gráfica que ofrece DirectX 11, nos daría un aumento 5 veces mayor comparada con una GeForce 9600 GT, una tarjeta lanzada a principios de 2008 y que sería el equivalente de la 650 Ti en su momento.
