MÁS VELOCIDAD PARA INTERNET
La principal apuesta de las empresas de telecomunicaciones para 2008 se concentra en la conexión a Internet, especialmente a través de la instalación de nuevos cables submarinos.
Columbus Networks, con una inversión de US$80 millones, está instalado un nuevo tramo del cable Arcos entre Miami y Colombia.
La línea, de 2.500 kilómetros y que estará lista para el segundo semestre de 2008, dividirá en cuatro anillos la conectividad de banda ancha internacional que llega a 19 países de la región Andina, Centroamérica, el Caribe y Estados Unidos.
Por su parte, Telefónica extenderá a Barranquilla el cable SAM-1, que permitirá conectar al país con un anillo que abarca Suramérica y el Caribe. El mismo tendrá una capacidad de 40 gigas, la mitad de ellas para uso exclusivo de Telecom, y el resto será comercializada con otros operadores. En el proyecto se han invertido más de US$35 millones.
Entre tanto, la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB) y la venezolana Cantv firmaron un acuerdo a través del cual la firma colombiana se interconectará con las redes de la telefónica del vecino país, lo que incluye el acceso de la compañía a uno de los cables submarinos que llegan a Venezuela.
Con este acuerdo, el país quedará conectado al cable submarino Globenet. El proyecto constará de 110 kilómetros de cable terrestre en dos tramos, 80 en territorio venezolano y 30 en el colombiano, los cuales serán interconectados a la altura del puesto fronterizo que une a Cúcuta con San Antonio del Táchira. Según las previsiones de las compañías, las obras deberán estar listas a finales del próximo año.
Los tres proyectos permitirán duplicar la capacidad actual de transmisión de datos, que en ocasiones se ve afectada si los cables submarinos actuales, Arcos, Maya y Panamericano, fallan. Así mismo, garantizan la expansión de los servicios de Internet y ofrecen ventajas competitivas en materia de conectividad.
Actualmente, el país tiene tres conexiones en el Caribe y una en el Pacífico. El cable Arcos, que entra por Riohacha y Cartagena, es el más importante por su amplia capacidad de transmisión.
Por Tolú ingresa el Maya, de mediana capacidad y un sustituto del Arcos, mientras que el Panamericano ha visto disminuida su funcionalidad a servicios de voz.
La principal apuesta de las empresas de telecomunicaciones para 2008 se concentra en la conexión a Internet, especialmente a través de la instalación de nuevos cables submarinos.
Columbus Networks, con una inversión de US$80 millones, está instalado un nuevo tramo del cable Arcos entre Miami y Colombia.
La línea, de 2.500 kilómetros y que estará lista para el segundo semestre de 2008, dividirá en cuatro anillos la conectividad de banda ancha internacional que llega a 19 países de la región Andina, Centroamérica, el Caribe y Estados Unidos.
Por su parte, Telefónica extenderá a Barranquilla el cable SAM-1, que permitirá conectar al país con un anillo que abarca Suramérica y el Caribe. El mismo tendrá una capacidad de 40 gigas, la mitad de ellas para uso exclusivo de Telecom, y el resto será comercializada con otros operadores. En el proyecto se han invertido más de US$35 millones.
Entre tanto, la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB) y la venezolana Cantv firmaron un acuerdo a través del cual la firma colombiana se interconectará con las redes de la telefónica del vecino país, lo que incluye el acceso de la compañía a uno de los cables submarinos que llegan a Venezuela.
Con este acuerdo, el país quedará conectado al cable submarino Globenet. El proyecto constará de 110 kilómetros de cable terrestre en dos tramos, 80 en territorio venezolano y 30 en el colombiano, los cuales serán interconectados a la altura del puesto fronterizo que une a Cúcuta con San Antonio del Táchira. Según las previsiones de las compañías, las obras deberán estar listas a finales del próximo año.
Los tres proyectos permitirán duplicar la capacidad actual de transmisión de datos, que en ocasiones se ve afectada si los cables submarinos actuales, Arcos, Maya y Panamericano, fallan. Así mismo, garantizan la expansión de los servicios de Internet y ofrecen ventajas competitivas en materia de conectividad.
Actualmente, el país tiene tres conexiones en el Caribe y una en el Pacífico. El cable Arcos, que entra por Riohacha y Cartagena, es el más importante por su amplia capacidad de transmisión.
Por Tolú ingresa el Maya, de mediana capacidad y un sustituto del Arcos, mientras que el Panamericano ha visto disminuida su funcionalidad a servicios de voz.