Los videojuegos son para muchas personas solo un pasatiempo, una forma de divertirse que no tiene por qué tener mayores efectos en sus la vidas. Las demás son personas que se toman muy en serio los videojuegos y los convierten en su trabajo. Lo mismo ocurre en el fútbol: la mayoría son jugadores amateurs que aman el deporte, pero unos pocos lo adoran y lo practican hasta el punto en que se ganan la vida jugando. Esta es la historia de Lucas Ordóñez, un joven que hace tres años comenzó una aventura que lo llevaría de la sala de su casa en España al podio de las 24 horas de Le Mans, una de las carreras más icónicas y exigentes del mundo.
Todo comenzó en 2008, cuando Lucas –de 22 años y un amante de los autos de carreras que estaba en medio de una maestría en administración de empresas– escuchó sobre el programa GT Academy auspiciado por Nissan y Sony. La idea de la competencia era sencilla: reunir a los mejores jugadores de Gran Turismo, para muchos el mejor simulador de carreras que existe, y premiarlos con un una verdadera oportunidad para ser pilotos de carreras en la vida real. La parte complicada era quedar entre los primeros 16 de los 25.000 individuos seleccionados para competir.
Lucas lo logró, y después de pasar por un entrenamiento en Inglaterra sumamente exigente, donde “su fuerza, resistencia, agilidad mental y habilidades de conducción fueron llevadas hasta el límite”, adquirió su licencia de conductor profesional tipo ‘C’, la cual le permitió competir en el Copa GTA de Europa. Desde su debut mostró promesa al ubicarse en el tercer puesto y en el noveno lugar en el GTA Dubai International de 2009. Desde entonces su carrera como piloto profesional va en crescendo, pues ganó la Copa GTA de Europa en su primer año y pasó a una nueva competencia: la Copa Internacional de Le Mans.
Esta fue su reacción después de su primera carrera.
El domingo pasado Lucas hizo historia al quedarse con el segundo puesto de las 24 horas de Le Mans, la carrera de resistencia más antigua del mundo automovilístico. “Hoy todos mis sueños se hicieron realidad”, dijo Lucas a Motorsport.com. “Hace tres años me gané un increíble premio pero ni en mis más grandes sueños me pude imaginar que llegaría hasta el podio de LeMans. ¡He estado en la aventura más grande que se puedan imaginar y tengo que agradecerle a Nissan y a PlayStation por crear la GT Academy”!
Desafortunadamente, la competencia para este año ya cerró, pero el éxito de Lucas podría motivar a Sony y Nissan a ampliar la GT Academy a otras regiones del mundo el próximo año para que incluya más a nuestra región. Por otro lado, el joven español es un ejemplo a seguir para muchos pilotos en potencia que se pasan horas castigando a su PS3 con Gran Turismo 5 y creen que tienen con qué competir en la vida real, pero también lo es para cualquier persona que quiera moriría por cumplir sus sueños pero que no lo hace porque ve demasiados obstáculos en el camino.
Lucas simplemente aplicó algo que está escrito en todos los libros de historia: las grandes hazañas solo las logran quienes las intentan.
Fuente : Enter.co
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