Niña de 12 años mató a joven que la acosaba, en Chiriguaná (Cesar)
Según testigos, la menor disparó el pasado 26 de febrero contra Martín Moreno Martínez, de 20 años, ante sus constantes piropos y cortejos.
El joven que se ganaba la vida como jornalero en haciendas y potreros del centro del Cesar, no desaprovechaba ocasión en sus ratos libres para cortejar a Ledis (*), que vivía con sus padres en una finca de Rincón Hondo, corregimiento de Chiriguaná, en ese mismo departamento.
Desde finales de año pasado la figura menuda y agraciada de la muchachita se le había convertido en una obsesión a este campesino, cuenta la gente de la región.
Sin embargo, sus pretensiones caían en la nada. El pensamiento infantil de Ledis no estaba para amoríos, y por ello nunca le aceptó invitaciones y le rechazaba las insinuaciones de establecer un noviazgo.
Desenlace final
A las 2 de la tarde del pasado 26 de febrero, ambos coincidieron por casualidades del destino en la finca La Florida, de propiedad de un hermano de Ledis.
En cuanto la vio, Martín empezó su plan conquistador que no le gustaba a la niña. "La versión que tenemos es que el muchacho comenzó a molestar a la chica, aprovechando que las personas de la casa se encontraban distraídas en sus quehaceres", contó ayer a HOY un investigador policial desde Chiriguaná.
Tras media hora de insistencia Ledis le pidió al joven que la dejara en paz, pero este no le prestó atención y siguió presionándola.
En un momento dado la muchacha se sintió tan asediada, dice la misma fuente, que agarró una escopeta calibre 16 de fabricación artesanal que su hermano guardaba en la casa de la finca y le apuntó a Martín, al tiempo que le pedía que no la molestara más.
De acuerdo con la hipótesis policial, el campesino como que creyó que el arma no estaba cargada o que la muchacha no tenía las agallas para apretar el gatillo.
"Al parecer no le paró bolas al asunto y siguió diciéndole cosas a la chica. Esta como que se llenó de valor y le disparó", contó también el investigador.
Martín recibió el disparo pleno en el tórax y se desplomó moribundo. Labriegos de la finca lo recogieron para llevarlo al hospital de Chiriguná, pero el esfuerzo no sirvió de mucho, porque murió antes de recibir asistencia médica.
Ahora la victimaria se encuentra a órdenes de un Juzgado de Menores que trata de esclarecer los hechos, pero permanece bajo custodia del Bienestar Familiar que le ofrece asistencia sicológica.
ROBERTO LLANOS RODADO
Especial para HOY