Campus Party llega a Madrid sin juegos y con aforo limitado
Una Campus Party para trabajar y no para bajar. Es la filosofía de la cita que este año, y sin que sirva de precedente, tendrá lugar en la Caja Mágica entre el 14 y el 18 de abril.
El evento, que se enmarca esta edición dentro de la presidencia española de la Unión Europea, no reunirá a miles de aficionados a los juegos en red o a las descargas. Serán sólo 800 elegidos, todos jóvenes talentos de los 27 países de la UE. "La gente ya tiene en casa la tecnología para descargar a una velocidad aceptable. La motivación este año es otra", señaló ayer Francisco Ragageles, presidente de la organizadora, Futura Networks. Para evitar distracciones éste se elimina el espacio dedicado a juegos. Sin embargo, la Campus Party espera congregar a más de un millón de internautas.
Aún hay tiempo para participar in situ y a gastos pagados. Los jóvenes tienen que presentar un proyecto a través de la web de Campus Party. El 70% de los elegidos serán sobre ciencia e innovación y el resto vinculados a la lucha contra la pobreza.
La apuesta por los jóvenes innovadores cuenta con un presupuesto de tres millones de euros, según señaló la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia.
Y a pesar de que la Campus Party es una acampada frente al monitor, el Ayuntamiento ofrecerá a los campuseros una villa de residentes.