“En el Mundial del 98, todos los jugadores a las 4 de la mañana estábamos despiertos viendo a los Chicago Bulls, por Michael Jordan. Y al otro día, estábamos con sueño”.
Independiente que eso de la desunión fuera cierto o no, sinceramente actuaciones como esa dicen mucho del profesionalismo de los jugadores, ahí se nota la seriedad y el compromiso con que asumieron el reto de participar en un mundial.
Definitivamente parece ser que la concentración durante el mundial de 1998 no distó mucho de la recocha que fue la concentración del equipo durante el mundial de 1994.