La Ciencia apenas descubre lo que escrito estaba

La Ciencia y los libros sagrados - Decimosexta parte

EL UNIVERSO ENVEJECE, PERO SE REGENERA (continuación)

El artículo ¿La evolución viola las leyes de la Termodinámica? nos da más luces sobre el asunto:
El argumento creacionista se basa en un malentendido fundamental de la termodinámica y la Segunda Ley. Las leyes de la termodinámica sólo se aplican dentro de un sistema termodinámicamente "cerrado", en el cual no puede entrar energía libre desde el exterior del sistema. Bajo tales circunstancias, la energía libre disponible se usa y se degrada hasta que no pueda hacer trabajo, conduciendo a un decaimiento termodinámico y a un incremento en la entropía y en el desorden, justo como la casa en nuestro ejemplo cae inevitablemente en el deterioro.

Sin embargo, como señalé anteriormente, hay una forma de revertir esta tendencia hacia el desorden y mantener el orden -si gasto energía nueva y hago más trabajo. Un sistema en el cual hay energía libre disponible desde el exterior es un sistema termodinámicamente "abierto", y en dicho sistema es posible revertir la entropía (adicionando nueva energía libre). Esta nueva energía tiene sin embargo un precio qué pagar -ella reduce el monto de energía libre que está disponible en el exterior del sistema, y por lo tanto, incrementa la entropía del sistema total.

El universo mismo, por ejemplo, es un sistema termodinámicamente cerrado. No puede entrar nueva energía libre desde el exterior, así que su entropía se incrementa inevitablemente. De hecho, la entropía inevitablemente lo destruirá, agotando y usando toda su energía libre y reduciéndolo a un reino frío en inerte donde no hay flujo de energía, una condición conocida como "muerte térmica".

Sin embargo, al contrario de las afirmaciones creacionistas, la Segunda Ley y el incremento de la entropía no se aplican en "todos los sistemas" -sólo se aplica en aquéllos que no tienen flujo entrante de energía libre. La Segunda Ley se aplica sólo en los sistemas cerrados. La vida en la tierra no es un sistema termodinámicamente cerrado -constantemente está recibiendo energía libre desde el exterior en la forma de luz y energía solar. La vida en la tierra es capaz de canalizar esta energía libre para hacer trabajo y así, reducir la entropía y moverse realmente desde el desorden hasta un estado mayor de organización.

Sin embargo, mientras la tierra está usando esta energía libre desde el sol para reducir su entropía, el sistema solar como un todo está experimentando un incremento de su entropía, y morirá de forma inevitable a medida que el sol use toda su energía libre disponible y alcance su muerte térmica. Hasta ese momento, sin embargo, hay suficiente energía libre disponible en la tierra para hacer trabajo y reducir localmente la entropía, y ésto permite a la vida volverse más y más organizada (menos entropía) incluso aunque el sistema solar como sistema esté perdiendo energía libre (más entropía).
Así que todo depende del punto de referencia que adoptemos. En la Tierra, la creación está en constante evolución, en continuo cambio. El universo en general, eventualmente, alcanzará la muerte térmica, pero eso aún está lejos de suceder, aún hay evidencias de juventud en él. Esto reafirma la idea de que el universo no fue creado de forma ya acabada desde un principio. En todo caso, podemos afirmar que la Biblia nos da una enseñanza muy importante en este punto. Más allá de lo científicamente correcto que pueda resultar el pasaje de Hebreos 1:10-11, y obviando los errores en los que incurre Ureña en su interpretación y justificación del mismo, este texto bíblico nos muestra de forma acertada que todo en el mundo es pasajero, incluso la vida del hombre, que todo cambia, se transforma, y que por ello no podemos cifrar nuestras esperanzas en los bienes materiales y en lo que el mundo nos ofrece. "¿Es que no reflexionan en su interior? Dios no ha creado los cielos, la tierra y lo que entre ellos existe sino con una finalidad y por un período determinado. Pero muchos de los hombres se niegan a creer en el encuentro con su Señor", Surah 30:8. No es necesario tratar de forzar una correlación entre los descubrimientos científicos y estos textos sagrados para ver su valor como guía espiritual.

EL CREADOR SUPERA A SU CREACIÓN

iluvala dijo:
LEY DE LA CAUSA Y EFECTO:
En pocas palabras esta ley establece que la Causa siempre debe ser mayor que el Efecto. Si tú empujas una pared y eres capaz de derribarla, entonces tu fuerza (la Causa), debe ser mayor a la fuerza de resistencia que la pared te ofrece (el Efecto). En Génesis 1:1, la Biblia nos dice cómo Dios (la Causa) creó la Creación (el Efecto). Por tanto Dios es mayor que su creación. Si del "Big Bang" apareció la inteligencia, esta ley mantiene que la Causa del Big Bang debió ser más inteligente que su Efecto, ¡nosotros!
Aquí me confundí un poco, pues Ureña, en su página sobre Armonía en la física - La 3ra Ley: La Ley de la Causa y Efecto afirma que se refiere a la Tercera Ley de la Termodinámica, enunciada por el físico y premio Nobel de química alemán de origen polaco Walther Nernst, y que básicamente se refiere a que en el cero absoluto, cualquier proceso de un sistema se detiene y la entropía alcanza un valor constante.

El pastor Ureña, en cambio, habla de una "ley de causa y efecto", que es el sexto principio de la verdad contemplado en el Kybalión, texto francmasón escrito probablemente por el abogado ocultista estadounidense William Walker Atkinson a finales del siglo XIX, con base en los principios herméticos, atribuidos al sabio egipcio de la época pre-faraónica Hermes Trimegisto, considerado como el padre de la alquimia. cLos Siete Principios de la Verdad son un conjunto de creencias filosóficas y religiosas que generó varias escuelas esotéricas, entre ellas la Metafísica y la Orden Rosacruz. El sexto principio de la verdad del hermetismo reza así: "Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo con la ley. Casualidad no es sino un nombre para la ley no reconocida; hay muchos planos de causación, pero nada se escapa a la ley". Parece que Ureña se sale del cristianismo apocalíptico que profesa (este pastor no ahorra esfuerzos para encender los ánimos y arrastrar al mundo a su fin) y se mete en terrenos del ocultismo para argumentar que sólo Dios pudo originar el Big Bang. Y al hacerlo, entra en contradicción consigo mismo, pues si Dios creó al universo a través del Big Bang, no pudo haber creado al universo de forma acabada como lo aseguró en su artículo sobre la Primera Ley de la Termodinámica. Esta ley de causa y efecto me recuerda el libro La Revolución de Bel, publicado en 1.950 por el místico colombiano y fundador del movimiento gnóstico latinoamericano Samael Aun Weor. Este movimiento, aunque no está relacionado en forma alguna con el gnosticismo histórico, tiene claros fundamentos en algunas ideas de sectas gnósticas del cristianismo primitivo, así como de la metafísica y otras escuelas místicos. En el capítulo 18 (El Milenio) del libro mencionado, Samael dice:
Y recibí orden de los señores del Karma para encerrar a Yahvé y a todos los magos negros en el abismo. [...]

Llegada la noche en que debía obedecer la orden de prender a Yahvé, marché con todos mis discípulos en rigurosa formación militar, echándole vivas a Yahvé, y lo rodeamos y prendimos por sorpresa. [...]

Luego lo encerramos en el Avitchi de la luna negra. Siete puertas atómicas de hierro conducen a ese plano de conciencia y en la gran puerta externa permanece colgada la espada conque Miguel venció a Luzbel y a todas las legiones tenebrosas de los antiguos períodos cósmicos.

Los magos negros se horrorizan al ver esa espada. Yahvé tenía un Karma gravísimo, pues fue el autor secreto de la crucifixión del Cristo, y el directo responsable del fracaso de la evolución humana en la tierra. Esa deuda vieja tenía irremediablemente que pagarla, pues nadie puede impunemente burlarse de la ley.

Los señores del Karma me entregaron una enorme y pesada cruz llena de púas para que crucificara a Yahvé con la cabeza para abajo y los pies para arriba, pues él crucificó al Cristo y ahora el Karma entrará en acción.
Samael estudió metafísica y estuvo en la Orden Rosacruz. Decía que la tierra estaba dominada por Cristo, líder de los magos blancos, y por Yahvé, líder de los magos negros, y que ambos permanecían en lucha eterna. Semejante disparate me recuerda a los adeptos a Creciendo en Gracia, tatuados con el tan mentado 666, que hoy se sabe no fue el número originalmente escrito en el Libro de las Revelaciones (en el papyro Oxyrhynchus 4499, que contiene una versión del Apocalipsis de Juan de finales del siglo III d.C. —la más antigua que se conoce— se lee 616, mientras que en otros textos aparece como 665). El que quiere creer por creer, termina creyendo cualquier idiotez.

No vamos a decir que Ureña es un masón escondido bajo una máscara de pastor cristiano. Quizás él se remonta a los primeros siglos de la iglesia cristiana, cuando los textos de Hermes gozaban de gran autoridad entre los doctores cristianos. O quizás Ureña confunde la ley de causa y efecto con la Tercera Ley de Newton o Ley de Acción y Reacción, promulgada en 1.687 por el alquimista, físico, filósofo y matemático arrianista inglés Isaac Newton, padre de la Mecánica Clásica, y que dice que "las fuerzas siempre se presentan en pares de igual magnitud y sentido opuesto y están situadas sobre la misma recta".

Si Ureña se refiere a la ley física, está totalmente desfasado en su pretensión. Tengamos en cuenta que la física newtoniana del siglo XVII no tiene nada que ver con la Teoría del Big Bang, que es un modelo dentro de la Teoría General de la Relatividad formulada por Einstein en el siglo XX. Como ejemplo de la diferencia entre ambas explicaciones del universo, puedo decir que mientras Newton considera la gravedad como una fuerza de atracción entre los cuerpos celestes, Einstein explica la gravedad como una consecuencia de la curvatura del universo. El modelo que dio sustento a la Teoría del Big Bang, fue desarrollado por el físico y astrónomo ucraniano George Gamow, pionero del desarrollo de la Teoría Cuántica de la Radiactividad. Su modelo, de 1.948, predijo la radiación de fondo de microondas, cuyo descubrimiento accidental en 1.964 por parte de los ganadores del Nobel, el físico judío alemán Arno Allan Penzias, y el físico estadounidense Robert Woodrow Wilson, fue la principal demostración de que la Teoría del Big Bang es correcta.

No se pueden mezclar peras con papas, no podemos tratar de explicar una Teoría fundamentada en la Relatividad con una Ley newtoniana. Ahora bien, si Ureña en realidad se refiere al sexto principio de la verdad del hermetismo, la forma como lo aplica está profundamente equivocada. Mirémoslo de este modo: si la forma como el pastor Ureña aplica este principio fuese correcta, entonces deberíamos decir que la humanidad es cada generación más estúpida, o para ser más exactos, un poco menos inteligente que la anterior, pues la causa (los padres) será siempre más inteligente que el efecto (los hijos). De igual forma, el conocimiento que se transmite de generación en generación es cada vez menor, pues la causa (el maestro) siempre será mayor que el efecto (el alumno), por lo que jamás el hijo superará al padre ni el alumno al maestro y, en consecuencia, el hombre —como especie— está abocado a convertirse en… ¡simio! Ureña nos ha planteado una teoría lineal de evolución inversa, en la que la especie se degrada progresivamente a un nivel de desarrollo cerebral inferior.

EL CHECKLIST DE LA CREACIÓN

afiebrao dijo:
De arranque la biblia comienza con un cuento que ni un bachiller medianamente preparado podría creer (obviamente desde un punto de vista científico):
Comenzó creando el cielo y la tierra, luz y tinieblas, noche y día el primer día, continentes y océanos el segundo día... así hasta el cuarto día donde creó dos lumbreras una grande y una pequeña (sol y luna) y ¡ahhhhh!, también las estrellas... obviamente creadas sólo para alumbrar a la tierra en la noche. Que visión tan patética sobre la formación de la tierra y el universo. ¿No le parece algo extraño desde el punto de vista científico haber ya diferenciado día y noche-luz oscuridad días antes de crear el sol? ¿Y que el enorme universo sólo haya sido creado para poner unos lindos punticos brillantes en las noches terrestres?
En efecto, la descripción bíblica de la creación no suena muy coherente. Si de fe se trata, se puede creer cualquier cosa, que Dios hizo la luz y no necesitaba ninguna fuente para ella, o que Él mismo era la fuente de luz antes de crear las estrellas. Pero si vamos a la lógica, es imposible que haya luz en el universo sin esos reactores nucleares de fusión que llamamos estrellas. No parece muy inteligente el checklist que verificó Dios durante la creación. Por su parte, el Corán es más reservado en este tema, no especifica el orden en que Dios creó las cosas, y no habla de la creación en días sino en eras (los creacionistas cristianos defensores de la Tierra Antigua, pero detractores de la teoría del lapso, interpretan los seis días de la creación bíblica como seis eras). "En verdad, vuestro Sustentador es Dios, que ha creado los cielos y la tierra en seis eras, y está asentado sobre el trono de Su omnipotencia. Cubre el día con la noche, que le sigue rápidamente; con el sol, la luna y las estrellas sujetos a Su mandato: ¡en verdad, Suyos son por entero la creación y el mandato", Surah 7:54. Pareciese que en el Corán, a Dios no le interesa brindar al hombre información científica sobre la creación del universo, tanto como manifestar claramente a la humanidad que es Él el creador y sustento del mismo. ¿No será ésta una lección importante a aprender sobre cómo interpretamos la Biblia?

¿VISIBILIDAD O DENSIDAD?

iluvala dijo:
La palabra "cosas" es usada en el lenguaje griego para describir lo "más pequeño y diminuto" "lo más elemental" "las partes más básicas de algo". Estos versos nos enseñan que "todas las cosas" se mantienen y se sostienen por el poder inherente puesto en ellas. […] En otras palabras, el material del universo, en su estado más básico realmente no es físico, sino que está compuesto por "cosas invisibles" "cosas que no se pueden ver", según otras versiones. Los hombres de "ciencia" del pasado han intentado razonar y pensaban que las cosas visibles habían sido hechas de otras cosas visibles y que estas cosas podían ser explicadas completa y fielmente en términos de leyes mecánicas y otros modelos. No obstante, en el Siglo XX ha habido una explosión del conocimiento […], y se ha descubierto, gracias a la física atómica, una pequeña galaxia de partículas girando alrededor de un núcleo. La distancia de estas partículas giratorias al núcleo es de ¡aproximadamente la misma distancia o radio de la tierra al sol! En otras palabras, el átomo en su mayoría está compuesto de espacio, y la materia está compuesta de átomos. Por tanto, el hombre en su mayoría está compuesto de espacio o ¡substancias no-físicas!
"Por la fe comprendemos que el universo fue hecho por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía", Hebreos 11:3. Debo empezar diciendo que este pasaje no tiene ninguna implicación científica, simplemente afirma que lo que se ve fue hecho de palabras, palabras de Dios, que no se pueden ver. La razón de ser de este texto bíblico no es brindar información científica, sino reafirmar el hecho de que Dios es el creador de universo. Pero bueno, admitamos que esto puede relacionarse con el hecho de que lo visible está constituido por cosas no visibles.

El que algo no sea visible, no significa que no sea físico. No son visibles las amebas, a menos que utilicemos un microscopio, pero son entidades físicas biológicas. No se pueden ver las bacterias, a menos que utilicemos microscopios electrónicos, pero mucho antes que dichos microscopios electrónicos se inventaran, ya el químico católico francés Louis Pasteur, padre de la microbiología, había hablado de microorganismos responsables de la descomposición de los alimentos y de las infecciones de las heridas. Pasteur nunca vio un virus, pero inventó las vacunas. La bomba atómica, primera prueba de laboratorio hecha en la Tierra que demostró que la Teoría de la Relatividad estaba en lo cierto al afirmar que la masa puede transformarse en energía, mostró al mundo los efectos de la fisión de los átomos; es decir, la explosión de Hiroshima fue el efecto de la física de lo invisible. Pero muchos siglos antes de Einstein, muchos siglos antes del modelo atómico del físico danés y premio Nobel Niels Böhr, la palabra átomo ya existía. Los primeros en decir que la materia estaba constituida por partículas invisibles fueron los griegos antiguos, que llamaron a cada una de estas partículas átomo, que en griego significa "que no se puede separar". Esta idea dio origen a un sistema filosófico llamado atomismo, atribuido al griego Sidonio Mosco en el siglo XIV a.C. Lo que significa que 1.500 años antes que Dios revelara esta información en el Nuevo Testamento, ya los griegos la conocían. Por lo tanto, decir que los hombres de ciencia pensaron siempre que todas las cosas visibles estaban constituidas por cosas visibles, es completamente falso.

Incluso el espacio que existe entre las partes constitutivas de la materia, es una entidad física, y no una "substancia no-física". Claro que Ureña utiliza físico por tangible, que no es lo mismo. Entonces lo que él defiende, es que el hombre y todas las cosas visibles, están constituidos en gran medida por algo no tangible, por espacio. Esto ya estaba previsto en la concepción de materia de los antiguos griegos, para quienes la única forma en que un cuchillo podía cortar una manzana, era gracias a los espacios entre los átomos (y no se equivocaban, no se pueden cortar átomos con un cuchillo, son los espacios entre ellos los que permiten el corte). No sólo hay espacios entre los constituyentes de las cosas que vemos, sino que todo está en movimiento. Las moléculas de un sólido están en movimiento. Si la energía de dichas moléculas aumenta con el consecuente aumento de su movimiento, el sólido cambia de estado y se vuelve líquido. Si aumenta aún más la energía de las moléculas y su movimiento, el líquido cambia de estado y se vuelve gas.
iluvala dijo:
LA MATERIA EXISTENTE EN UN CUERPO HUMANO EN REALIDAD ES MENOR QUE LA CABEZA DE UNA AGUJA. No es hasta recientemente cuando los científicos se han dado cuenta de que toda la materia se mantiene unida por atracción (fuerza de cohesión), y por energía. O sea por "cosas que no se ven". La ciencia cada día descompone más y más el átomo y la tendencia luce presentar el dilema de que en realidad ¡nada es físico o tangible, sino energía!
En el gas, las moléculas están muy separadas unas de otras, hay mayor espacio entre las partes constitutivas de la materia, hay menor densidad. En el sólido, por el contrario, las moléculas están mucho más cercanas, hay menor espacio y mayor densidad. A mayor densidad, menor espacio entre moléculas y entre átomos, mayor concentración de la materia. Si se comprime a un ser humano de forma que se convierta en una bola de materia densa, podría llegar a tener el tamaño de la cabeza de una aguja, o mucho menos. Según la Teoría del Big Bang, el universo entero cabía en una cuchara o menos, un punto diminuto de densidad infinita. Esto prueba que las cosas visibles están conformadas por cosas no visibles que tienen espacio entre ellas, pero entonces, ¿diríamos que aquí la Biblia está corroborando el Big Bang? Francamente, no creo que el texto de Hebreos 11:3 sirva para argumentar que la Biblia habla de la existencia de los microorganismos, las moléculas, los átomos, las partículas subatómicas, el espacio entre la materia, los estados de la materia y el concepto de densidad.

Por otro lado, decir que la ciencia, al ir descomponiendo el átomo en partículas subatómicas, se está enfrentando al dilema de que todo es energía, no tiene ningún asidero. En primer lugar, el conocimiento que hoy tenemos del átomo nos revela una estructura muy compleja, la materia es mucho más compleja de lo que se pensaba, pero es materia, cumple con el Principio Cuántico de Exclusión, enunciado en 1.925 por el físico austríaco y premio Nobel judío (aunque bautizado católico romano) Wolfgang Pauli. Este principio, en palabras sencillas, afirma la impenetrabilidad de la materia. No importa qué tanto se pueda descomponer el átomo y qué cantidad de partículas posea, sigue siendo materia, no energía. Otra cosa es que, como ya dije en este artículo, la Teoría de la Relatividad demostró, con su famosa fórmula e=mc2, que la materia y la energía son en realidad equivalentes, es decir, una puede transformarse en la otra, con lo que podemos considerarlas dos estados de lo mismo. Por tanto, a ningún físico puede sorprender hoy día que todo sea en últimas, de alguna forma, energía. Los reactores nucleares de fisión (y el recién inaugurado reactor de fusión chino) son la prueba de que la materia se convierte en energía. Lo que aún no se ha hecho en la práctica, pero en la teoría es igualmente cierto, es que la energía se convierte en materia (sólo hay que despejar m en la fórmula anterior), lo que significa que materia y energía son dos formas, estados o manifestaciones de una misma cosa. Eso no presenta ningún dilema para la ciencia, todo lo contrario, la ciencia lleva décadas utilizando este conocimiento para generar energía atómica.

(Continúa...)
 
La Ciencia y los libros sagrados - Decimoséptima parte

¿VISIBILIDAD O DENSIDAD? (continuación)

Lo que no entiendo, es a dónde quiere llegar el pastor Ureña con esta parte. En su texto, Ureña pide ver una cita adicional. "Tú solo eres Jehová. Tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos. Tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran", Nehemías 9:6. Y también cita textualmente: "Cristo es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación, porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes que todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten", Colocenses 1:15-17. Ureña afirma que en este punto, a través de las citas anteriores, defiende una correlación entre la Biblia y la evidencia científica de que la materia está constituida por cosas invisibles y por espacio entre ellas. Luego argumenta que la materia se mantiene unida por cosas invisibles, y que todo es, en últimas, energía. La cita de Colocenses dice que Dios es invisible, y la de Nehemías dice que Dios es quien vivifica todas las cosas. Al poner todo junto, mi conclusión es que, para el pastor Ureña, Dios es energía, y se manifiesta en la fuerza de cohesión y en las fuerzas subatómicas, y la prueba de que Dios creó el universo está en las fuerzas mencionadas y en el espacio que existe entre las partes constitutivas de la materia. Si esta es la concepción que de Dios tiene el pastor Ureña, podría ser seriamente cuestionada por la ortodoxia del protestantismo y del catolicismo. Pero quizás yo estoy malinterpretando a Ureña, y él simplemente quiere demostrar que Dios reveló en la Biblia que las cosas visibles están hechas de cosas invisibles, lo que ya sabían los griegos, por lo que no es una revelación científica de la Biblia.

Mi conclusión es que el pastor Ureña no tiene ningún argumento para afirmar que la Biblia revela la constitución de la materia. Eso sí, me causa asombro llegar a este punto y encontrarme con la afirmación de Ureña respecto a que "en el Siglo XX ha habido una explosión del conocimiento", pues el pastor abrió con el texto de 1 Corintios, 1:19-20, según el cual Dios destruye la sabiduría de los sabios y frustra la inteligencia de los inteligentes. Me permito agregar otra cita al respecto. "Lucho para que sean consolados sus corazones y para que, unidos en amor, alcancen todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio de Dios el Padre y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento", Colosenses 2:2-3. Sin entendimiento no se llega al conocimiento, y en Cristo están escondidos los tesoros del conocimiento, así que uniendo estos dos textos con la afirmación de Ureña, debo concluir que en el siglo XX hubo una gran cantidad de personas que conocieron el misterio de Dios y de Cristo, y Él les brindó el entendimiento para que hubiera esa explosión del conocimiento. En cambio, durante la edad media, pocos conocieron el misterio de Dios (aunque en esa época era la Iglesia la que reinaba y era la Biblia la principal y casi exclusiva fuente de conocimiento científico) y por ello, Dios destruyó la sabiduría y frustró la inteligencia. Cabe anotar aquí que, mientras el mundo cristiano se sumía en el oscurantismo durante el Medioevo, el mundo del Islam explotaba en conocimientos, recuperaba la sabiduría de la Grecia antigua (que el mundo cristiano había rechazado por hereje) y creaba la Casa de la Sabiduría, donde trabajaron hombro a hombro científicos musulmanes, judíos, cristianos de diversas sectas y gentes de otros credos, dándole un avance enorme a las ciencias, en particular a las matemáticas. Gracias a que los musulmanes dominaron buena parte de la Península Ibérica durante más de 4 siglos, sus enormes conocimientos y su poderío económico hicieron florecer esta parte del mundo (mientras París seguía siendo una ciudad gris y llena de tugurios, los musulmanes convirtieron a Córdoba en la ciudad, de lejos, más hermosa, avanzada y floreciente en las artes, las letras y la economía, de toda Europa). Cuando los reyes católicos unificaron las coronas de Aragón y Castilla, éste reino fue la mayor potencia del mundo durante siglos, gracias en buena parte a la herencia que recibió del Islam, lo que le permitió conquistar América. La positiva influencia del Islam en la cultura, la ciencia y la economía ibéricas, fue pieza clave para que Colón haciera sus viajes de exploración y descubrimiento. Y el idioma español que utilizo para escribir este artículo, le debe mucho de su riqueza al árabe: la letra J y más de cuatro mil palabras del diccionario español, como almohada, baño, café, elixir, hazaña, jirafa, limón, paraíso, ronda y zanahoria, son de origen árabe. Entonces, ¿diríamos que durante ese tiempo, fueron los musulmanes los que conocieron el misterio de Dios y fue a ellos a quienes Él les brindó el entendimiento para que tuvieran su explosión de conocimiento, sin la cual Occidente tendría un retraso de siglos?

Hay un último dato a tener en cuenta con respecto a este tema. El pastor Ureña, al decir que en el siglo XX ha habido una explosión del conocimiento, pide que se lea dos o tres veces el siguiente versículo: "Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia aumentará", Daniel 12:4. Un mensaje apocalíptico subliminal en el texto. Mientras habla de la constitución de la materia y trata de forma poco coherente de demostrar que Dios está en la energía que mantiene unidas a las partículas subatómicas para formar los átomos, el pastor Ureña nos suelta esta perla para convencernos de que el final de los tiempos está cerca. Sólo me referiré a esto con tres breves reflexiones:
  1. La explosión de conocimientos en occidente de que habla Ureña se viene dando desde la Revolución Científica iniciada en el siglo XVI por el astrónomo, físico, jurista y matemático católico polaco Nicolás Copérnico, y se ha acelerado desde la Revolución Industrial iniciada a mediados del siglo XIX, con una aceleración vertiginosa a partir de la Revolución Informática iniciada con la invención del microprocesador por el ingeniero eléctrico estadounidense Marcian Hoff en 1.971. Hace siglos que la ciencia crece y el estilo de vida se acelera (la Revolución Industrial pudo ocurrir gracias a La Ilustración, que existió gracias a la explosión de conocimientos del imperio del Islam, recogida y traducida por los monjes cristianos, que a su vez ocurrió gracias al desarrollo de las ciencias en la antigua Grecia). Me parece cuando menos irresponsable decir que el final de los tiempos está cerca, cuando los supuestos indicios se vienen dando desde hace tanto tiempo.

  2. El mundo cristiano no es todo el mundo. En el mundo islámico, por ejemplo, los años no se cuentan desde el nacimiento de Cristo (que es incierto, hasta donde se sabe debió nacer entre el año 4 a.C. y el 7 a.C.), sino desde la Hégira, que es el momento en que Mahoma y la primera comunidad musulmana se trasladan de La Meca a Medina, de forma que para 1.322 millones de musulmanes, no estamos en el año 2.007 sino en el año 1.428, y para unos 13 y medio millones de judíos, estamos en el año 5.767. Tanto el mundo musulmán como el judío han tenido sus épocas de explosión de conocimientos, así como Egipto, India, China, etc. En conjunto, podemos decir que durante los últimos 6.000 años o más, no se ha detenido el avance científico de la humanidad.

  3. Si comparamos la situación del mundo en el año 2.000 d.C. con la situación del mundo en el año 1.000 d.C., veremos que la generalización de guerras, enfermedades y desastres naturales en el mundo fue muy similar. Siendo estas las señales del fin de los tiempos, no me cabe duda que hoy día no estamos más lejos ni más cerca del fin que hace un milenio.

***​

El pastor Ureña ha terminado de publicar pequeños artículos que, según él, son evidencia de la armonía entre la ciencia y la Biblia. A continuación, me refiero a los textos de Ureña de esta serie, a los que no hace mención el LANero Mr.Fang.

ROMA: ORIGEN DEL DERECHO OCCIDENTAL

En su nota Armonía en los códigos de leyes, Ureña afirma:
Ureña dijo:
Las leyes de Moisés forman las bases de los sistemas legales usados hoy día en todos los países libres. No obstante a que otras grandes civilizaciones tuvieron códigos de leyes similares al de Moisés, los mismos ni se acercaban en justicia y equidad a aquellas proporcionadas en el Pentateuco.
El antiguo derecho hebreo está consignado en el Pentateuco, que corresponde a la Torah, los cinco libros que según la tradición judía fueron escritos por Moisés (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio), aunque estudios de expertos han determinados que estos textos han sido escritos por varios autores a lo largo de varios siglos. La Ley (Torah) es la base y regulación de la vida judía, en particular de los judíos ortodoxos, que la consideran revelación divina (hecha directamente por Jehová a Moisés). Si bien la simbiosis entre religión y ley del derecho hebreo es un antecedente histórico del derecho canónico católico, las leyes de Moisés han influido muy poco los sistemas legales usados hoy día en occidente. En realidad, es el Derecho Romano el considerado como el medio por excelencia para la enseñanza jurídica en nuestras facultades de derecho. El Derecho Civil en todos los países de occidente, está profundamente enraizado en el derecho romano, mientras que el Derecho Mercantil o Comercial actual tiene sus raíces en el Código de Hammurabi, de origen mesopotámico, aunque también está influenciado por las leyes mercantes marítimas fenicias y por el derecho romano.

El Derecho de Familia en occidente, es el que ha sido influenciado por el Derecho Canónico, que tiene sus orígenes en el Corpus Iuris Civilis, la más importante recopilación del derecho romano, hecha en el siglo VI por órdenes del emperador bizantino de origen macedonio Justiniano I (considerado santo por la Iglesia Ortodoxa), y dirigida por el jurista bizantino Triboniano. Esta compilación es la que ha servido de base fundamental para el Derecho Continental Europeo, heredado de España por los países Latinoamericanos. La revolución papal iniciada por el católico italiano Gregorio VII (elegido papa por el pueblo romano, en contra de la disposición del Concilio de Melfi, que decretó que en la elección papal sólo podía intervenir el Colegio Cardenalicio), permitió el Decreto de Graciano en 1.140, que organizó y sistematizó un cuerpo de normas de aplicación universal, cuyo estudio dio inicio al derecho canónico moderno, que sería complementado principalmente por los Decretales de Gregorio IX. Así se constituyó el cuerpo del derecho canónico de la iglesia católica, que permanecería hasta la adopción del Código de Derecho Canónico, ordenado por el italiano Pío X (considerado santo por la Iglesia Católica Romana), y promulgado por el también italiano Benedicto XV, para su aplicación a partir de 1.918.

Quizás lo que aquí se pretende es hacernos creer que al haber sido el cristianismo la religión oficial del Imperio Romano, el derecho hebreo se convirtió en el derecho romano y así, hoy día es el derecho hebreo el que predomina en el mundo occidental. Nada más lejano de la realidad. Cuando Constantino I El Grande declaró al cristianismo como la religión oficial del imperio, lo hizo para darle a Roma la cohesión y unidad que estaba perdiendo ante la decadencia de la sociedad y las religiones romanas y la fuerte influencia de tradiciones y religiones de los pueblos conquistados, como Egipto y Persia. Pero eligió de entre las sectas cristianas existentes, la única conformada por gentiles (la única no judía), que existía gracias a que Saulo de Tarso (el judío fariseo que, según la tradición, perseguía a los cristianos para entregarlos a los romanos, a una muerte segura, y que luego se hizo cristiano y cambió su nombre al de Pablo) había tenido la idea de que el mensaje de Jesús debía ir más allá del pueblo de Israel. El mensaje de Pablo tuvo buena acogida entre los intelectuales griegos y macedonios, y gracias a esto el cristianismo se amalgamó con la cultura helénica, perdiendo todos los elementos de tradición judía que tenía, como la celebración de la pascua y el guardar el sábado. Constantino pudo entonces utilizar esa vertiente helena del cristianismo para unificar al imperio en una sola religión. Así se constituyó la Iglesia Católica Romana en el siglo IV, a la que Constantino (uno de los principales santos para la Iglesia Ortodoxa, a pesar que fue pagano toda su vida y en su lecho de muerte pidió ser bautizado por un sacerdote del arrianismo) y sus sucesores aseguraron un largo futuro al financiar la iglesia y más tarde, perseguir y destruir a las demás sectas cristianas, especialmente a los gnósticos y a los arrianos (el arrianismo sostenía la unicidad de Dios en la misma forma que lo hacían los judíos y que lo harían los musulmanes posteriormente. Los arrianos estaban en contra de la idea de la Trinidad que había surgido como consecuencia de la inclusión de ideas paganas entre los cristianos gentiles). Constantino dio dinero a la Iglesia que a través de los siguientes siglos se fue conformando a imagen y semejanza de Roma, por ello la jerarquía eclesiástica católica funciona igual que la jerarquía política imperial romana, con una cabeza única (el Papa a modo de Emperador) y un colegio cardenalicio (a modo de Senado). La eucaristía católica (copiada en su casi totalidad de la eucaristía que se celebraba al dios persa Mitra) es un ritual sobrecargado de solemnidad, simbolismo y grandeza apropiados para una religión imperial, a pesar que lo ostentoso de esta celebración va en clara contravía con el ejemplo de humildad que dio Jesús en vida. Viendo que el arrianismo era muy fuerte y amenazaba a la iglesia imperial, Constantino convocó el primer Concilio Ecuménico de la Iglesia, en Nicea, que fue presidido por Osio, obispo de Córdoba y enemigo de los arrianos. En este Concilio se estableció el Credo de la Iglesia Católica (atribuido al teólogo católico alejandrino Anastasio, considerado santo por la Iglesia Católica Romana, el más acérrimo enemigo del arrianismo, y a quien se debe el canon oficial del Nuevo Testamento) y la doctrina de la Santísima Trinidad. Para darle mayor fortaleza a la nueva religión imperial, Elena, la madre de Constantino, afirmó haber encontrado una pieza de madera de la cruz en la que había muerto el Cristo (lo que era imposible más de tres siglos después de su muerte), haber hallado el lugar exacto del sepulcro de Jesús, y haber descubierto el camino que había seguido Jesús en su camino hacia el Calvario (lo que resultaba absurdo después de muchas destrucciones y reconstrucciones de la ciudad, que cambiaron por completo el trazado de sus calles). Constantino hizo construir iglesias en estos lugares supuestamente santos, que aún hoy día son sitios de peregrinación de los cristianos de todo el mundo, aunque hace décadas se sabe que es imposible que el sepulcro de Jesús estuviera donde se ubicó la Iglesia del Santo Sepulcro, y que el camino por el que los cristianos transitan haciendo el via crucis no tiene la más mínima relación con la ruta originalmente seguida por Jesús hacia su muerte.

Teodosio I, el último emperador en gobernar tanto en oriente como en occidente, continuó la labor de fortalecer la Iglesia Católica como religión imperial, y en 392 dictó un edicto que prohibió todos los demás cultos en el Imperio Romano. Teodosio ordenó varias masacres de paganos para hacer cumplir este edicto. Como se ve, Roma jamás adoptó ninguna tradición, costumbre o legislación judías, pues para los romanos el pueblo hebreo siempre fue inferior y detestable. Roma adoptó el cristianismo heleno que practicaban los gentiles a su modo (un cristianismo contaminado por las costumbres, tradiciones y filosofías grecorromanas), acabó con el cristianismo original de tradición judía (que era unitario, no trinitario), e implantó la cultura, la religión y el derecho romano de forma tan autoritaria, absolutista y contundente, que aún hoy son los que dominan el mundo occidental. El tema de la Santísima Trinidad, que como vemos fue una doctrina adoptada por razones políticas, no religiosas, ha sido centro de fuertes debates desde que se estableció en el siglo IV hasta nuestros días. Incluso durante el surgimiento de la Reforma, los teólogos protestantes que atacaron esta doctrina fueron perseguidos por los reformistas tanto o más que por los católicos. Dos de los principales fundamentos bíblicos en contra de la Trinidad son: la palabra trinidad no aparece ni una sola vez en toda la Biblia (ni siquiera en la católica, que incluye los libros deuterocanónicos), y el evangelio muestra a Jesús diciendo: “—¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno sino uno: Dios”, Mateo 19:17. Esta cita también se encuentra en Marcos 10:18. Con esta frase, Jesús confirma que él no es Dios, pues él no es bueno, bueno sólo es Dios. Igualmente, cabe la pregunta: Si Jesús es Dios, ¿cómo hacía para orar a Dios, que era él mismo, por ejemplo en el episodio del monte Getsemaní? Si Jesús es consustancial con Dios padre, ¿por qué le dice al padre “Aparta de mí esta copa; pero no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieres tú”, Marcos 14:36? Si son consustanciales, si son un solo Dios trino, ¿cómo puede cada uno tener una voluntad diferente, al punto de que uno imponga su voluntad sobre el otro?

No nos desviemos. Es interesante anotar que el Derecho Internacional Humanitario, que aparece en occidente en la segunda mitad del siglo XIX, tiene antecedentes en el Islam, más de mil años antes. El Corán y la Sharia (Derecho Islámico), contemplan el derecho de gentes, la guerra justa, la protección a los no combatientes y la diplomacia como forma principal de resolución de conflictos. La reciente Conferencia sobre DIH e Islam en Islamabad, mostró que entre ambos hay más similitudes que diferencias, tanto en el fondo como en el espíritu:
Según el profesor Salah Abdul-Badi Shalaby, de Egipto, el Islam distingue claramente entre combatiente y no combatiente. Las normas islámicas no sólo hacen esa clara distinción sino que estipulan exhaustivas directrices sobre la protección de los no combatientes, que se asemejan a las disposiciones consagradas por el DIH. Uno de esos principios comunes es la importancia de que en una zona de guerra siempre haya un lugar donde se goce de inmunidad. Asimismo, ambos derechos abogan firmemente por que se trate con humanidad al enemigo. Es interesante observar que las normas islámicas prevén también el suministro de agua a un campamento enemigo.

Tanto en la Sharia como en el DIH, se estipula claramente el trato debido a los prisioneros de guerra y se hace referencia a la compasión por el enemigo capturado. "Tratar a las personas como a uno le gustaría que se le trate", así resume el Dr. Abdul Rahman bin Zayd al-Zinedi, especialista saudita, la lógica del hincapié islámico en el perdón al peor enemigo. Ahondando aún más en el concepto, existe una coherencia entre los dos sistemas de derecho en relación con el trato al personal sanitario, a mujeres y niños, a los heridos, a las personas desaparecidas, a los muertos y los desplazados. […]

Así pues, el islam prohíbe los actos inmorales, humillantes y degradantes, así como los abusos contra la dignidad de la persona humana, aun cuando son perpetrados contra el enemigo. La Sharia abarca también los daños colaterales y prescribe una compensación por pérdida de vidas y bienes para los no combatientes, sean o no musulmanes, durante un conflicto. Puesto que para el Islam todas las razas son la creación de Dios, la limpieza étnica queda también estrictamente vedada, otra coincidencia con el DIH.
Poco o casi nada del derecho hebreo queda hoy en el derecho occidental. Sin desconocer algunos avances notables en la concepción de la ley hebrea (ver Éxodo 22:1-9 y Levítico 19:15), debo decir que la afirmación del pastor Ureña es completamente falsa.

LA BIBLIA Y EL CICLO DE EVAPORACIÓN DEL AGUA

"Él atrae las gotas de agua cuando el vapor se transforma en lluvia, la que destilan las nubes, y se vierte en raudales sobre los hombres", Job 36:27-28. "Todos los ríos van al mar, pero el mar no se llena. Al lugar de donde los ríos vinieron, allí vuelven para correr de nuevo", Eclesiastés 1:7.
Ureña dijo:
Note lo asombroso de esta declaración. Lo que esto implica es que estos autores de la antigüedad ya conocían el principio básico del ciclo del vapor de agua.

Lo que este pasaje bíblico declara es que el agua en la tierra sigue el proceso siguiente:
1) los ríos se vacían en el mar.
2) las gotas de agua subsecuentemente se convierten en vapor, siguiendo el proceso de "destilación" antes mencionado.
3) el agua una vez evaporada y colectada en las nubes tiende a precipitarse y regresa a los ríos "para correr de nuevo" el mismo ciclo.

Ustedes se sorprenderán de saber que esto fue escrito cientos de años antes de que la cultura griega apareciera. Sin embargo, la ciencia de hoy día acredita a Aristóteles con ser el primero en comprender el ciclo de evaporación/condensación del agua que produce la lluvia. Y lo que resulta aún más asombroso es que no fue hasta los años 1.900 cuando se descubrió que lo que producía la formación de las nubes era el ciclo de expansión y enfriamiento del aire que se elevaba de los lagos, ríos y mares.
Vamos por partes. La mayoría de los expertos datan el libro de Job entre el 500 y el 250 a.C., y las principales ciudades estado de la Grecia Antigua comenzaron a aparecer entre el 800 y el 700 a.C. (varios siglos antes), por lo que Ureña está errado al decir que el libro de Job se escribió cientos de años antes que apareciera la cultura helénica (cuyos orígenes se remontan al 2.000 a.C.). De hecho, Aristóteles fue más o menos contemporáneo del autor del libro de Job, aunque las teorías de Aristóteles sobre la evaporación del agua no necesariamente fueron conocidas por el autor del libro de Job.

Fue el ceramista, escritor y científico protestante francés precursor del método científico Bernard Palissy, quien en 1.580 enunció el ciclo del agua. Hasta entonces, predominó la creencia aristotélica de que la precipitación no era suficiente para alimentar los ríos, y que el agua del océano, a través de procesos de evaporación y condensación dentro de cavernas subterráneas, se desalinizaba y brotaba de la tierra.

En este punto, estoy de acuerdo en que Job 36:27-28 y Eclesiastés 1:7 demuestran un inusitado conocimiento de meteorología por parte de sus autores. Igualmente sorprendente es el texto coránico que dice: "¿No ves que es Dios quien empuja las nubes, luego las agrupa, luego las apila en masas, hasta que puedes ver la lluvia salir de en medio de ellas? Y es Él quien hace descender de los cielos, gradualmente, masas gigantescas de nubes cargadas de granizo, con el que golpea a quien quiere y que aparta de quien quiere, mientras que el resplandor de Su relámpago deja casi sin vista a los hombres.", Surah 24:43. Este texto describe correctamente la manera como se forman los cumulonimbos, que son las nubes de la lluvia, y describe también de forma correcta su tamaño, pues estos cumulonimbos son literalmente masas gigantescas de varios kilómetros de ancho y de alto.

Aquí vuelvo a la misma pregunta que me hice cuando hablé del fuego interno de la Tierra. Si aceptamos que la Biblia en este punto es científicamente correcta, deberíamos aceptar también que el Corán, en cuanto a las nubes, revela información que era desconocida hasta mediados del siglo XX. Si aplicamos la lógica del pastor Ureña, que afirma que sólo Dios pudo poner en la Biblia información científica veraz hace tantos siglos, por esa misma lógica deberíamos decir que sólo Dios pudo poner en el Corán información igualmente veraz hace también muchos siglos. Entonces, ¿es el Corán un libro de inspiración divina, tanto como la Biblia?

Esta es una pregunta delicada, no tanto para los musulmanes, que consideran que la Biblia (o por lo menos parte de ella) es revelación divina del Dios de Abraham, pero que ha sido modificada y malinterpretada por los hombres, y que por ello ese mismo Dios envió el mensaje del Corán a Mahoma a través del ángel Gabriel:
"No obstante, tales originales no se han conservado intactos con el paso del tiempo, por lo cual no podemos aseverar con certeza que las versiones que hoy circulan de estos textos sean copias fieles del Mensaje original de los mismos. En consecuencia, si bien es respetada como texto sagrado, los musulmanes no consideran a la Biblia como un conjunto infalible, inerrable, completamente inspirado por Dios. Aún así es respetada como una fuente de enseñanzas, aunque las mismas deben ser corroboradas a través de otra fuente segura como lo es el Corán. Es decir que aquello de la Biblia que contradiga al Corán, lo rechazamos. Pues nosotros estamos plenamente seguros de la autenticidad del Corán pero no podemos confirmar lo mismo sobre la Biblia". Tomado del Curso de Islam de Abdallah Yusuf de la Plata.
El problema es para los cristianos, que rechazan el Corán. Ya se que para muchos será sencillo encontrar la típica salida fácil: "El Corán es inspiración de Satanás para confundir a los hombres". Pero esto entraña un dilema muy profundo: ¿Entonces, Satanás es también omnisciente? ¿Pudo Satanás dar información científica corroborable en el Corán, tanto o más como lo hizo Dios en la Biblia? ¿Cómo pudo Satanás inspirar el Corán, un libro que habla de solidaridad incluso con el enemigo, que plantea principios de humanitarismo, que hace hincapié en la igualdad entre las "razas" humanas y entre el hombre y la mujer? ¿Acaso pudo Satanás dictar un libro en el que permanentemente se alaba a Dios como creador y sustentador y se instruye al ser humano para que lleve una vida recta, honorable y justa?

Es irónico que el pastor Ureña, que en su página web se ensaña permanentemente contra el Islam, falseando información, malinterpretando el Corán y alentando de forma irresponsable y retrógrada al choque entre religiones, termine planteando una lógica de "armonía entre la Biblia y la ciencia" que es igualmente aplicable al Corán y que, en últimas, termina demostrando que cualquier interpretación que se haga de la Biblia en tanto libro científicamente aceptable, es igual o más aplicable al Corán.

Por supuesto, sigue en el aire la pregunta que hice antes: ¿Son éstas pruebas de correspondencia entre la ciencia moderna y la Biblia y el Corán, o son interpretaciones acomodadas que, en nuestro afán por sustentar la fe, hacemos de los libros sagrados?

Resulta curioso advertir que el gráfico del ciclo del agua que el pastor Dawlin A. Ureña publicó para ilustrar su nota sobre Armonía entre la Biblia y la Meteorología, es el mismo gráfico que ya había sido utilizado por Islam en Línea en su página sobre El Sagrado Corán y las nubes. ¿Pura coincidencia?

También hay que tener en cuenta que la Biblia no es el único texto antiguo que habla del ciclo del agua. Según el mito de creación de los Guambianos, “el agua es vida, nace en las cabeceras y baja en los ríos hasta el mar. Y se devuelve, pero no por los mismos ríos sino por el aire, por la nube. Sube por las aberturas entre montañas y, por los filos de las montañas, alcanza hasta el páramo, hasta las sabanas, y cae otra vez como la lluvia”. En este mito, el ciclo del agua está aún mejor descrito que como aparece en Job y en Eclesiastés, y quizás sea aún más antiguo. ¿Cómo es que estos indígenas comprendieron el ciclo del agua mejor que Aristóteles, mejor que los españoles que los conquistaron? ¿Dios les reveló esta información?

(Continúa...)
 
La Ciencia y los libros sagrados - Decimoctava parte

LA CIRCULACIÓN DEL AIRE SEGÚN LA BIBLIA

"Porque él observa hasta los confines de la tierra y ve cuanto hay bajo los cielos. Al darle peso al viento y fijar la medida de las aguas, al darle ley a la lluvia y camino al relámpago de los truenos, ya entonces la vio él y la puso de manifiesto, la preparó y también la escudriñó", Job 28:24-27.

"Del sur viene el torbellino, y el frío, de los vientos del norte", Job 37:9

"El viento sopla hacia el sur, luego gira hacia el norte; y girando sin cesar, de nuevo vuelve el viento a sus giros", Eclesiastés 1:6

Ureña dijo:
Noten lo imponente de lo que escribieron estos hombres:

1. que el viento tiene peso; o sea, que el aire puede ser pesado. Pero hasta Galileo Galileili en el 1630, ¡ningun científico sabía que el aire tuviera peso!
2. que el viento viene del norte.
3. Y finalmente, que el viento tiene un curso circular en su trayectoria.

Hace apenas 114 años que los hombres "inteligentes" - esos mismos que se burlan de la Biblia - descubrieron que existían corrientes de aire o de viento. Hoy día, a través del uso de globos que llegan a gran altitud, los científicos son capaces de observar que el aire tiene una trayectoria con un modelo específico. Es gracias a esta trayectoria, más o menos previsible, que hoy vemos a los meteorólogos predecir el tiempo atmosférico. La próxima vez que usted se encuentre observando pronósticos del tiempo en la televisión, fíjese que éste es el método usado por los científicos para saber donde ha de llover, dónde hará frío, etc.

La ciencia moderna ha descubierto que el aire cálido se eleva en el Ecuador, entonces fluye hacia los polos, donde se enfría, y entonces cae a la superficie de la tierra, donde vuelve a fluir hacia el Ecuador, y continúa el mismo ciclo una vez más.
Ureña cae aquí en otro error histórico. El peso del aire, o presión atmosférica, nunca fue entendida por Galileo. Fue el filósofo, matemático y científico católico francés René Descartes el primero en hablar de peso del aire en 1.631, aunque éste no se comprobó hasta los experimentos del físico y matemático católico italiano Evangelista Torricelli. En todo caso, para el efecto es casi lo mismo, este texto bíblico antecede en unos 2.000 años a Descartes. Claro que el libro de Job no habla de peso del aire sino de peso del viento, y esto podría más bien hacer alusión a la fuerza del viento, que ha sido utilizada en la navegación a vela desde hace unos 5.000 años, por lo que no sería novedad alguna en los tiempos del libro de Job.

En cuanto a las corrientes de aire, estas varían de acuerdo a la zona geográfica donde se determinen. El flujo del aire en el planeta está determinado principalmente por la acción del sol y de la rotación de la tierra, teniéndose en cuenta que el sol no calienta el planeta de forma uniforme, y que las corrientes marítimas están íntimamente ligadas al flujo del aire.

Los vientos alisios soplan todo el año, aunque principalmente en verano y menos en invierno, y van de este a oeste. Sin embargo, el flujo del aire en el planeta es mucho más complejo que eso, por ello las predicciones meteorológicas son poco fiables, y en algunos lugares, imposibles de realizar (el clima tiende al caos, aquí entra en juego el azar del que hablaba con respecto a la matemática no lineal: una vez más, cualquier predicción del futuro es imposible, no existe un plan maestro ni un destino escrito).

Mi conclusión es que el autor del libro de Job conocía, como todos los agricultores y hombres de campo, los fenómenos climáticos locales de su tierra, y los plasmó en esta escritura, y que Eclesiastés habla de cómo los vientos van y vienen, como ya lo sabían los navegantes de siglos atrás. El único dato que queda en duda es el del peso del aire. Si el texto de Job no habla de la fuerza del viento, sino realmente de la presión atmosférica, esto sería admirable. Pero, ¿esta es una interpretación acertada? El artículo El Corán acerca de los mares profundos y las olas internas, pretende demostrar que el Corán habla sobre las sucesivas desapariciones de color por capas a medida que se desciende en las profundidades del océano, y sobre las olas internas del océano (en capas bajo la superficie) que ocurren por diferencias de densidad en el agua marítima. Todo esto, desprendido de esta aleya: "O bien, sus obras son como profundas tinieblas sobre un mar abismal que las olas, encrespadas unas sobre otras, hacen más oscuro, y sobre todo ello nubes oscuras: tinieblas sobre tinieblas, de forma que si uno saca la mano, apenas la ve: pues, ¡a quien Dios no da luz, no tiene luz en absoluto!", Surah 24:40. ¿Es este sencillo texto tan sorprendente en darnos información científica sobre los océanos, descubierta apenas con la tecnología de la segunda mitad del siglo XX? ¿O estos textos del libro de Job y del Corán son más bien filosóficos y somos nosotros quienes queremos ver en ellos tratados de ciencia?

Una mirada más profunda a este tema, nos devela que la tesis sobre Job y la presión atmosférica no es original de Ureña, sino que fue publicada por Morris en los años 1.980. El artículo ¿La biblia y la ciencia concuerdan?, le contesta a Morris de esta forma:
Morris señala que Job 28:25 es otra anticipación del conocimiento moderno (The Biblical Basis for Modern Science, 1.984, pág. 276). Él lo interpreta como una referencia a la "presión atmosférica", que era desconocida en tiempos antiguos. La palabra hebrea "öql" significa peso o siclo. Corresponde al "öiqlu" acadio y al "tql" arameo y ugarítico (NIDOTTE Vol. 4, 235-7). La NVI traduce "la fuerza del viento". Job no está hablando de la presión atmosférica, sino de la fuerza del viento.

¿LA BIBLIA HABLA DE "TESOROS DE LA NIEVE"?

Ureña dijo:
En Job 38:22 la Biblia nos relata que Dios se le presenta a Job y, entre otras cosas, le dice:
"¿Has entrado tú en los tesoros de la nieve, o haz visto los tesoros del granizo…? […]

Al leer este versículo usted deberá preguntarse: ¿Qué tesoros puede contener la nieve o el granizo? Pues el tesoro es doble. Primero usted debe saber que la nieve al caer deposita nitrato en el suelo. Y el segundo es un tesoro estético y exclusivo de los copos de nieve, ya que los mismos tienen una belleza asombrosa en su simetría. ¡Después de analizar cientos de copos, los experimentos en los laboratorios demuestran que no hay dos copos de nieve idénticos!
La cita que hace Ureña, es tomada de la versión antigua Reina-Valera (de 1.602), que se mantuvo así en la revisión de 1.909. La cita completa es Job 38:22-23:

"¿Has tú entrado en los tesoros de la nieve, o has visto los tesoros del granizo, lo cual tengo yo reservado para el tiempo de angustia, para el día de la guerra y de la batalla?", Reina-Valera, versión de 1.909 .

Sin embargo, las últimas revisiones han cambiado el término:

"¿Has penetrado tú hasta los depósitos de la nieve? ¿Has visto los depósitos del granizo, que tengo reservados para el tiempo de angustia, para el día de la guerra y de la batalla?", Reina-Valera, versión de 1.995.

"¿Has visitado los depósitos donde guardo la nieve y el granizo para enviarlos en tiempos de desgracia, en tiempos de batallas y de guerra?", Dios Habla Hoy, versión de 2.002.

¿Se han equivocado y han tergiversado la palabra de Dios los que han emprendido las revisiones más modernas publicadas? ¿Podemos, entonces, en base a este supuesto, pensar que la Biblia sí ha sido transformada con el pasar de los siglos y que, como afirman Testigos de Jehová y otros cristianos, así como el Islam, nuestra actual Biblia ha sido tergiversada, manipulada y mal interpretada?

De tesoro a depósito hay un trecho enorme. Si nos atenemos a la Reina-Valera de 1.995 y a la Dios Habla Hoy de 2.002, los argumentos expuestos por Ureña no tienen asidero. Así que me pregunto de nuevo, ¿contiene realmente la Biblia esta supuesta información científicamente correcta, o esto responde sólo a una interpretación errónea de las Escrituras?

Pero digamos que Ureña tiene razón y que la Biblia se refiere a que hay un tesoro de magnífica belleza en cada grano de granizo y en cada copo de nieve. En realidad, el espectáculo de una buena granizada o de una nevada es tan hermoso, que no es necesario tener un microscopio y ver los cristales de hielo para admirarse de su belleza. No encuentro aquí una revelación científica importante, máxime si ponemos la cita en su contexto: Dios le está hablando a Job, a modo de regaño, y le dice que si acaso él (Job) tiene idea de cuánta nieve y cuánto granizo tiene el Señor guardado para lanzarlo sobre el mundo. Y como sabemos que el granizo y la nieve no se guardan en ninguna parte, sino que se van formando y van cayendo como la lluvia, eso no nos da ninguna información científica correcta. Es verdad que la nieve y el granizo ayudan a depositar nitrato y amonio en la tierra. Pero la lluvia también lo hace, y no es nombrada como "tesoro" en este pasaje bíblico; estos versículos no nos dan información química que nos indique que alterar el ciclo del nitrógeno tendrá consecuencias nefastas para nuestro planeta. En efecto, el uso de fertilizantes nitrogenados en agricultura a partir del siglo XX ha tenido consecuencias desastrozas en los ecosistemas, y de ello no nos alerta el libro de Job. El artículo El Nitrógeno en la Lluvia Nacional nos dice:
La Agencia Norteamericana de Protección Medioambiental estima que, solo con el uso de fertilizantes, en 1.997 se emitieron medio millón de toneladas de amoniaco a la atmósfera. Más del triple que esa cantidad fue emitida por desechos del ganado (estiércol y orina). [...]

Si bien la precipitación limpia el aire, la lluvia y la nieve contienen nitratos y sulfatos, haciendo que ésta sea más ácida. Tanto estatuas y monumentos como los exteriores de los edificios están expuestos a los daños por lluvia ácida. La precipitación también afecta a las corrientes de agua, lagos y suelos sensibles, que pueden alterarse fácilmente con aportaciones químicas. La precipitación ácida puede perturbar el delicado equilibrio en estos ecosistemas sensibles.

La deposición de nitrógeno puede asimismo tener un efecto fertilizante. En estuarios y ecosistemas de la costa, esto puede llevar a la eutrofización, una condición caracterizada por el crecimiento de algas, nivel bajo de oxígeno disuelto y pérdida de invertebrados, peces, y otros tipos de flora y fauna.
Esta cita es suficiente para desvirtuar cualquier posible aporte al conocimiento científico de este texto bíblico. Decir que la nieve es un tesoro, en ningún momento nos informa que la nieve participa en el ciclo del nitrógeno, y jamás nos advierte que la contaminación atmosférica convierte a la nieve en enemigo de los ecosistemas.

Considero una interpretación muy forzada y acomodada la que le da Ureña a este texto, máxime si tenemos en cuenta las últimas actualizaciones, que se supone están basadas en los más recientes descubrimientos de textos antiguos de las Escrituras y en los avances que han gozado los conocimientos en lenguas antiguas.

Lo importante de este pasaje, en todo caso (como creo que sucede con todos los demás), no es la supuesta información científica que pueda revelarnos, sino el mensaje moral y filosófico que trata de transmitirnos.

LAS ÁGUILAS NO SE CANSAN

"Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen; mas los que esperan en Jehová tendrán nuevas fuerzas, levantarán alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán", Isaías 40:30-31.
Ureña dijo:
El pasaje declara que las águilas poseen la habilidad exclusiva de ¡volar con sus alas en una posición tal que no se cansan!

En los túneles de viento de la universidad de Oklahoma se descubrió exactamente la misma verdad científica que declara Isaías 40:31. Mientras conducían investigaciones aerodinámicas durante la primavera del 1971, los investigadores de la Universidad de Oklahoma descubrieron que las águilas tienen seis plumas con unos espacios o ranuras en las puntas las cuales se curvan hacia arriba mientras planean o vuelan.

Las medidas tomadas indicaban que estas ranuras en las plumas que se curvan hacia arriba reducen el tamaño del vórtice que emana de la punta de cada ala. Este fenómeno a su vez hace que la resistencia al avance se reduzca (fricción - resistencia de las alas contra el aire). Esto le permite a las águilas volar o planear distancias asombrosas aprovechando las corrientes de aire sin la necesidad de batir sus alas.

2,760 años después de que el profeta Isaías escribió esta asombrosa verdad, la "ciencia" ha tropezado ¡conque la Biblia tenía razón!
Esta argumentación de Ureña sí es pura fantasía. No me atrevería a decir que el pastor había sucumbido a los efectos de las anfetas cuando escribió esta nota, pero sí debía estar por lo menos trasnochado, cansado, no en completo uso de sus facultades. Empiezo por decir lo que resulta obvio al más primerizo de los lectores: Este texto en ningún momento dice que las águilas vuelan sin cansarse. Lo que revela el libro de Isaías en este punto, es que Dios no conoce el cansancio, y no desfallece en su empeño de dar al cansado fuerzas que no tiene (ver Isaías 40:27-31). Incluso la cita en específico, dice que quienes esperan en Dios levantarán las alas, y al correr no se cansarán, y al caminar no se fatigarán. ¿Dónde dice que las águilas vuelan sin cansarse? No hay asidero alguno para semejante aseveración.

Lo que sí es cierto, es que águilas y buitres pueden planear por millas, pero esto no tiene que ver con ranuras en las plumas de las puntas de las alas, sino con el diseño aerodinámico de su cuerpo que les permite utilizar corrientes ascendentes de aire caliente para mantenerse en vuelo sin aletear. No es que tengan seis plumas con ranuras en la punta, sino que el ave extiende las plumas de las puntas de las alas para formar una especie de "ranuras" en el borde del ala (formadas por los espacios entre las plumas extendidas), que le permiten reducir la turbulencia y aumentar la sustentación, no disminuir la resistencia aerodinámica, que es muy distinto. La idea no es reducir la fricción, sino darle mayor sustentación al ala para que el ave no caiga en barrena y se mantenga en vuelo a menor velocidad, y así no tener que gastar energía aleteando. No se si la investigación a la que se refiere Ureña exista (no encontré datos al respecto), y si existe, seguramente él no la entendió, pero lo cierto es que la cita de Isaías no tiene nada que ver con la aerodinámica del águila.

¿ALGUIEN SABE QUÉ SON LOS RELÁMPAGOS?

"¿Quién le abrió un cauce al turbión y un camino a los relámpagos y los truenos, haciendo llover sobre la tierra deshabitada, sobre el desierto, donde no vive ningún ser humano, para saciar la tierra desierta y sin cultivo y para hacer que brote la tierna hierba?", Job 38:25-27
Ureña dijo:
Aquí se declara que los relámpagos son los que causan la caída de las lluvias hacia el suelo donde el hombre no vive. El texto también habla del "camino a los relámpagos" para hacer llover. No fue hasta el 1930 que se usaron cámaras de alta velocidad (100 millas por hora) para fotografiar los relámpagos. Cuando redujeron la velocidad de la película tomada, se descubrió que antes de que ocurriera la aparición de la luz del relámpago (destello), seguida por el estruendo del trueno, ocurría lo que los científicos llamaron, "el líder", el cual precede al destello. Este fenómeno meteorológico llamado "líder" no es más que una especie de "sondeo" o "determinación" del camino o la trayectoria que el destello y el rayo han de seguir. ¡Este "líder" es una señal eléctrica débil enviada a la tierra antes de que el destello y el rayo procedan para abrir trilla a los mismos! [...].

Fue a partir de este descubrimiento cuando los meteorólogos comenzaron a entender el porqué de las descargas eléctricas ocurridas antes del inicio de las lluvias. Pido a nuestros lectores que recuerden que las nubes, las cuales están cargadas de gotitas de agua, no se forman hasta que no haya humedad en el aire. Por supuesto, estas gotitas de agua aún están muy lejos de ser gotas como las que usted y yo vemos caer del cielo cuando llueve. Se necesita casi un millón de esas gotitas para formar una gota de las caídas en la lluvia.

Sin embargo, a través de investigaciones realizadas, los científicos se han dado cuenta de la causa por la que los relámpagos preceden a la lluvia. Los radares han sido la clave en este descubrimiento. Los radares no mostraban la existencia de gotas de agua grandes en las nubes antes de la ocurrencia del relampaguear. No obstante, después de las descargas eléctricas, entonces los radares leían que las nubes de repente sí contenían gotas de agua grandes. Cuando usted se encuentre viendo el pronóstico del tiempo, fíjese en algunas imágenes del radar que muestran colores en las nubes. Estos colores muestran la densidad del agua contenida en las nubes.

Los experimentos en los laboratorios demuestran que las gotitas de agua se combinan para formar gotas de lluvia cuando las descargas eléctricas pasan a través de ellas. Las descargas eléctricas dejan a las gotitas con una carga opuesta, lo cual hará que las mismas atraigan a otras gotitas no cargadas con la misma polaridad (negativa o positiva), por tanto, formando gotas de agua de un tamaño suficiente como para poder caer a la tierra. Esta es la razón por la que durante un gran aguacero existe una demostración majestuosa de actividad eléctrica, usualmente en la forma de relampagueado.
Una vez más, tengo reservas respecto a la interpretación que hace Ureña de las Escrituras. No me queda claro que Job 38:25-27 especifique que son los rayos los que causan las lluvias, y aunque así sea, tal afirmación no es correcta. En primer lugar, no es necesario que hayan rayos y relámpagos para que llueva. En las islas del pacífico pocas veces caen rayos, sin embargo hay abundantes lluvias. En Bogotá llueve con frecuencia, pero es extraño que caigan rayos, o incluso que se vean rayos entre las nubes. En segundo lugar, se pueden presentar rayos sin lluvias. Cuando viví en Cali, uno de mis pasatiempos favoritos era ver los frecuentes espectáculos de luces que producían verdaderas "tormentas" de rayos en las nubes, que iluminaban la noche como un estroboscopio cósmico, sin que cayera una sola gota de agua, cosa poco común en Bogotá.

Contrario a la explicación de Ureña, que afirma que los rayos hacen que las gotas de agua se unan y llueva, lo que en realidad sucede es que los cristales de hielo de diferentes tamaños en lo alto de las nubes cumulonimbos son los que generan la electricidad que produce los rayos. Es decir, los rayos vienen después que están formadas las nubes de lluvia, no causan la lluvia, y no necesariamente llueve cuando hay rayos.

Lo que sí es cierto, es que la electricidad crea un "camino" antes que se forme el rayo. En el artículo Golpes de relámpago, un patrón impar sobre las planicies, se lee:
Donde hay relámpagos, mucha gente se preocupa que los tornados puedan seguir. El relámpago se asocia a las tormentas enérgicas, puesto que lleva a movimientos ascendentes grandes del aire —más el agua en varias formas, incluyendo las gotas de agua y los cristales de hielo— produciendo un potencial eléctrico grande.

Cuando el potencial llega a ser bastante grande, la electricidad perfora su camino a través del aire que normalmente aísla, y construye un puente estrecho de gas electrificado o plasma. La corriente cava su camino en busca de una región con carga opuesta, donde el desequilibrio puede ser aliviado. Cuando se encuentran los dos, la corriente fluye libremente e ioniza aún más aire en su trayectoria, creando una hidra brillante que vemos como relámpago. El aire calentado se expande y, cuando la descarga se para repentinamente, se cierra de golpe detrás para producir el trueno.
Existe otro texto de Job que habla del camino del relámpago: "Porque él observa hasta los confines de la tierra y ve cuanto hay bajo los cielos. Al darle peso al viento y fijar la medida de las aguas, al darle ley a la lluvia y camino al relámpago de los truenos, ya entonces la vio él y la puso de manifiesto, la preparó y también la escudriñó", Job 28:24-27.

Aceptemos que estos textos son reveladores, que nos brindan información científica sorprendente para su tiempo. Esto nos debe hacer reflexionar al menos en dos sentidos:

Primero: Una cosa es saber, y otra cosa es tener datos y poder utilizar ese conocimiento. Hoy día los científicos saben más acerca de los rayos gracias al descubrimiento de este camino eléctrico previo a su estallido. El libro de Job parece decirnos hoy día: "Eso ya lo había dicho Dios", pero esa información no tuvo ninguna utilidad, ni aún para cristianos devotos, hasta que la ciencia la halló por su propia cuenta. ¿Tiene algún sentido que Dios nos de información inútil? ¿No será mejor entender la Biblia no como un libro de divulgación científica, sino como una guía espiritual y moral? La Palabra de Dios es clara y sencilla en su mensaje, no necesitamos buscar códigos ocultos ni verdades científicas en ella, pues no es necesario ser un iluminado ni tener un postgrado universitario para poder entender el mensaje que el Señor nos da. Si así fuera, Dios estaría condenando de entrada a más de cuatro quintas partes de la humanidad, que jamás tendrán formación académica suficiente para entender Su Palabra.

(Continúa...)
 
La Ciencia y los libros sagrados - Decimonovena parte

¿ALGUIEN SABE QUÉ SON LOS RELÁMPAGOS? (continuación)

Segundo: Parece que de toda la Biblia, es el libro de Job (parte del Antiguo Testamento y del Tanaj) el mejor candidato a ser visto como una posible fuente de información científica. Esto plantea una pregunta interesante: ¿Por qué el libro más citado por Ureña es el libro con mayor controversia moral en la Biblia, y el que más nombra al enemigo? Job era "un hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal", Job 1:1. Pero Dios hace un pacto con Satanás, permitiendo que éste tiente a Job y le haga daño, al punto de que el enemigo no sólo le arrebata sus pertenencias, sino también sus hijos, y lo llena de llagas dolorosas. "Dijo Jehová a Satanás: —Todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él", Job 1:12. No voy a adentrarme en la discusión ética y moral de este libro, en particular del hecho de que Dios tenga tratos con el enemigo y le hable de igual a igual, pero voy a dar esta cita tomada de La influencia de la teología de Meister Eckhart en la psicología de la religión de C. G. Jung, a propósito del trabajo que sobre el libro de Job realizó el médico psiquiatra, psicólogo y ensayista místico alemán Carl Gustav Jung, hijo de pastor luterano, que también efectuó estudios comparativos de las religiones, la filosofía, la sociología, la crítica del arte y la literatura:
La tesis de "Respuesta A Job" es la siguiente: "Cualquiera que conoce a Dios, lo afecta, lo transforma". Esto es así porque para Jung la única manera de relacionarnos con Dios es conociendo las imágenes y símbolos del inconsciente. Esto implica hacernos conscientes del material psíquico que hemos heredado de nuestros antepasados, incluyendo la imagen de Dios. La conciencia humana cambia la naturaleza de la imagen de Dios. Para Jung, Dios necesita a la humanidad para ser completamente consciente y especialmente estar conciente de sus opuestos. La conciencia humana trasciende su origen divino (el inconsciente) en su habilidad para diferenciar los opuestos y en su capacidad de sufrir conscientemente su conflicto.

En su interpretación del libro de Job, Jung expone que Dios sufrió un fracaso moral en su encuentro con Job. Dios reconoció que Job poseía una capacidad que Él no tenía: consciencia de sus opuestos. Esto requirió que Dios se encarnará en un hombre con el propósito de adquirir consciencia de sus opuestos y remediar la injusticia que se cometió con Job. Sin embargo, la encarnación de Dios en Cristo es incompleta porque deja afuera el lado obscuro de Dios.
Sobre el libro de Job, dice la enciclopedia Encarta:
Se considera que el autor, anónimo, se inspiró en una historia popular o una epopeya israelita o edomita que se remonta a los inicios de la monarquía israelita como contexto para ambientar su diálogo poético. Más tarde otro escritor (o editor) añadió los discursos de un cuarto joven que acude a consolarle (capítulos 32 al 37). El libro es una parte de la literatura sapiencial del Antiguo Testamento, dentro de la que se incluyen el Eclesiastés y los Proverbios.
¿Debemos considerar el libro de Job como fuente de conocimiento científico revelado directamente por Dios? Puede hacerse, pero no desde la perspectiva simplista y absurda que propone el pastor Ureña. Veamos:

El filósofo y teólogo católico peruano Gustavo Gutiérrez Merino, reconocido por su compromiso con los pobres, publicó en 1.986 el libro Hablar de Dios desde el sufrimiento del inocente. Una reflexión sobre el libro de Job, donde sostiene que "tenemos mucho que aprender de él (Job) para nuestra relación de fe y esperanza con Dios y para nuestro quehacer teológico". Dice Gutierrez:
Protestando contra la injusticia que se comete contra él, Job es un testigo mucho más veraz de la fe en Yahvé que todos los que se acostumbran a la injusticia, hasta convertirla en un hecho necesario al interior del sistema humano: ese es el caso de los amigos de Job (se refiere a los tres amigos con quienes dialoga), y de los falsos amigos de Dios". Previamente ha afirmado H. Echegaray: "la fe de Job, en su intransigencia y desmesura es más correcta que la fe de sus amigos en su estrechez y conformismo. [...]

Ciertas tendencias dentro del mundo cristiano han dado nueva vida a lo largo de la historia a esta concepción ética que ve en la riqueza un premio de Dios al hombre honesto y trabajador, y en la pobreza un castigo al pecador y ocioso. Se trata para algunos de una categoría aceptada sin cuestionamiento. Recuérdese aquella expresión tan frecuente en ciertas biografías de santos: 'nació de padres pobres, pero honrados'. La honestidad hay que destacarla porque la pobreza parecería estar ligada al robo y a la delincuencia. [...] De otro lado, se sabe que históricamente la ideología del sistema capitalista se sirvió de este esquema doctrinal, primero abiertamente y al presente en formas más sutiles para justificarse religiosamente. [...]

Job suplica ser escuchado y que se le responda. La discusión entablada con sus amigos se convierte en un diálogo de sordos. La doctrina que esos teólogos profesan no les permite atender lo que otros dicen, los ecos de sus propias palabras tapan sus oídos... Callar y escuchar sería una manifestación de la sabiduría que pregonan poseer. Vivir de cerca los sufrimientos del pobre permite percibir el alcance de lo que Job solicita. Una arraigada convicción en los pobres y marginados es que nadie se interesa por su vida y sus desgracias. Tienen además la experiencia de recibir engañosas expresiones de preocupación por ellos que acaban hundiéndolos más en sus problemas. A ello se debe que en las comunidades eclesiales de base latinoamericanas muchos encuentran con sorpresa que sus dificultades importan a otros. Se crea así para ellos un inusitado espacio de libertad y comunicación que abona el terreno para acoger la palabra del Señor y también para convertirse en agente de su propia historia. Ese es el espacio que Job reclama. [...]

Los discursos de los amigos son conocidos y siempre los mismos, no aportan nada. No tienen relación con lo que vive y padece Job, por eso no pueden ser sino "consoladores inoportunos" (antes los había llamado "médicos matasanos", 13,4)
"Vosotros, ciertamente, sois fraguadores de mentira; todos vosotros sois médicos inútiles", Job 13:4.

Gutiérrez interpreta este versículo como un ataque contra la teología que no escucha a los pobres y sus necesidades, sino se limita a darles consuelos vanos, palmaditas en la espalda. Los amigos de Job son arrogantes, le dicen que reflexione y sólo después de ello sí podrá hablarles, pero esa invitación a "reflexionar" no es otra que "acepta mis argumentos, cuando pienses igual que yo podremos entendernos", una actitud que resulta lastimosamente típica entre gran cantidad de cristianos. Los argumentos de los amigos se acaban, la discusión llega a un punto muerto, Job comprende que sólo puede dirigirse a Dios, el único que puede darle respuestas. Según Gutiérrez, el libro de Job nos enseña la importancia de la solidaridad con los pobres y su defensa, y también nos muestra la gratuidad de la gracia de Dios: "El amor gratuito de Dios no tiene por motivo último las virtudes y merecimientos de los pobres sino la bondad y libertad de Dios, de un Dios que no es simplemente el guardián de un estrecho orden moral. Hay contradicción entre el amor libre , gratuito y creativo de Dios y la doctrina de la retribución que pretende encasillarlo". Estas resultan lecciones mucho más profundas y trascendentes que cualquier dato sobre la forma como se forman los truenos o sobre la naturaleza ígnea del interior de la Tierra que el libro de Job pueda darnos.

En su artículo Pobreza y Teología, Gutiérrez vuelve a hablar del libro de Job para decirnos:
La Biblia, el libro de Job entre otros, se refiere a dos lenguajes acerca de Dios que adquieren su pleno sentido sólo cuando se encuentran, se desafían y nutren mutuamente.

El lenguaje de la justicia

La justicia es un gran tema bíblico. Con frecuencia se presenta en el binomio justicia-derecho; hacer de él el núcleo de la vida del pueblo de Dios es una exigencia que tiene su raíz en la voluntad de Dios. La dimensión profética de la Biblia, que desborda los libros que llevan el nombre de profetas, abunda en el recuerdo de que la fe en Dios está ligada al establecimiento de la justicia y el derecho. Más aún, se trata de una acción que, en última instancia, tiene como sujeto a Dios mismo: “justicia y derecho sostienen tu trono”, canta el salmo (89,15). Ella es expresión de su santidad: Dios no es justo porque hace justicia, sino que hace justicia porque es justo.

Practicar la justicia, establecer el derecho son requerimientos que se entroncan con la santidad de Dios. Nos hablan de Dios. Para “implantar el derecho en la tierra” (Is. 42, 4) unge el Señor a su siervo, pone en él su espíritu (cf. Is. 42,1). Tarea que manifiesta el lenguaje profético —el dabar: acontecimiento y palabra, al mismo tiempo—, lenguaje de justicia que nos conduce a internarnos en el amor de Dios por toda persona, en particular por los oprimidos y excluidos. La preferencia por los últimos de la historia plantea la justicia como exigencia ineludible del Dios de la Biblia, ella va contra las desigualdades injustas que se dan en nuestra sociedad. Decíamos, líneas arriba, que la pobreza despoja a las personas de su condición humana y atenta contra su condición de hijas e hijos de Dios.

La preferencia es un rechazo de esa situación, una pauta para establecer la justicia y el derecho, por la dignidad humana y la filiación divina de todo ser humano. Sin rechazo de la pobreza (imprescindible lado de la opción por el pobre, como lo hemos recordado), sin compromiso por la justicia social, sin defensa de los más elementales derechos humanos no hay auténtica opción por el pobre; ni, por cierto, una preferencia que intenta corregir la inequidad social haciendo carne en la historia la igualdad de toda persona ante Dios.

Esa es la razón por la que la justicia de Dios y la exigencia de practicarla de parte de los creyentes es presentada siempre en la Biblia en relación con el pobre. La defensa del pobre, la denuncia y el rechazo de las vejaciones que sufre, la solidaridad con su causa no son sólo expresiones de esa justicia, son también su obligada verificación. De esa práctica y de esa exigencia proviene un lenguaje que nos permite hablar de Dios. Job lo descubre poco a poco, e inicia la salida de un mundo de premios y castigos que lo encerraba en él mismo y le impedía hablar correctamente sobre Dios. Comprende, no sin costo personal, que abrirse a los demás, hacerse “padre de los pobres” (Job 29,16; expresión que la Biblia reserva normalmente para hablar de Yahvé), es encontrar al Señor. [...]

El lenguaje de la gratuidad

Sin embargo, esa urgencia tampoco debe hacer que soslayemos la otra dimensión del hablar acerca de Dios. Nos referimos al que deriva del corazón mismo del mensaje bíblico: el amor gratuito de Dios que se adelanta a nuestras obras y méritos. Objeto de contemplación y oración, ciertamente; razón por la que es tema preferido de la mística cristiana, como lo muestra la historia de la espiritualidad. Pero es también un poderoso factor de exigencia. Nada, en efecto, es más demandante que la gratuidad, la iniciativa amorosa de Dios pide una respuesta. Lo sabe bien Pablo cuando, a propósito del trato a dar a Onésimo, dice a Filemón: estoy “seguro que harás más de lo que te pido” (v.21). La razón está en la frase evangélica: “dar gratis, lo que hemos recibido gratis” (Mt. 10,8).

La preferencia por el pobre no viene, en primer lugar (sería una descolocada idealización), de que sea necesariamente mejor —en un terreno moral o religioso— que los no pobres, sino debido a que se encuentra en una situación inhumana e injusta, contraria a la voluntad de Dios. El fundamento último de esa prioridad reposa en Dios, en su amor gratuito y universal. Es una cuestión de justicia, decíamos, pero no de una justicia que se refiere a normas externas, como lo es a menudo en nuestra sociedad y en el mundo religioso (la ejemplifican los amigos de Job), sino de una justicia radical y exigente que va al meollo de la injusticia y de la condición humana. Como aquella que se manifiesta en la parábola del trabajador de la undécima hora (cf. Mt 20,1-16). Vale en este caso la interpelante palabra de Yahvé: “mis caminos no son sus caminos” (Is. 55,8).
Y Raquel Rodríguez, en su artículo Esperanza contra esperanza. Perspectivas bíblico-teológicas de la pobreza desde la mujer latinoamericana, hace una interesante relación entre el mensaje del libro de Job y el movimiento de las Madres de Plaza de Mayo en Argentina:
El concepto pobreza que aparece en el texto bíblico nunca nos va a apuntar hacia un ideal digno de alcanzar sino por el contrario, apunta siempre hacia una situación de profunda maldad. Es una situación que debe ser superada, eliminada. La pobreza separa a Dios de su creación. Tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento encontramos que la causa de la pobreza aparece en forma muy clara: existe pobreza porque existe opresión y la causa principal de la opresión es la acumulación de riqueza por parte de unos pocos frente al empobrecimiento de la gran mayoría del pueblo. […]A muchas personas les puede sonar extraño el relacionar a las mujeres con Job. La mayor parte de las veces buscamos figuras femeninas en la Biblia para esta tarea. Sin embargo, existe un grupo muy singular de mujeres en América Latina que pueden relacionar su situación con la situación narrada en el poema de Job. […]Estas mujeres son las Madres de Plaza de Mayo. Al igual que Job, ellas no pertenecían a los estratos más pobres de la sociedad. En su mayoría han sido mujeres de clase media (tomando en cuenta esta categoría a partir de la realidad de América Latina y no de la perspectiva del primer mundo). Sin embargo, estas mujeres se han convertido en parte de las pobres de América Latina a partir de la desaparición de sus hijos e hijas a causa de la represión política bajo el régimen militar. Es una vez más el hecho de ser madres lo que las hace conscientes de la necesidad de organizarse en contra de la injusticia. Deciden poner fin a la búsqueda individual de sus hijos e hijas y comienzan a hacerlo en grupo, demandando la aparición con vida de los y las desaparecidas, en la Plaza de Mayo. Este lugar tiene profundas connotaciones políticas porque está localizado justo en frente de las oficinas centrales del gobierno y ha sido utilizado para debatir cuestiones políticas durante las campanas electorales. […]Al igual que Job, los demás se han mofado de ellas y han sido llamadas las “locas” las “dementes” —las locas de Plaza de Mayo. Sin embargo, nunca han dado un paso atrás. […]Aunque no se ha hecho justicia con todas estas mujeres. no han perdido la esperanza. Es la misma esperanza que las ha mantenido desde el principio cuando comenzaron su largo camino de búsqueda de sus seres queridos. Y ellas pueden celebrar, y alaban el nombre de Dios aún en medio del sufrimiento porque algunas de ellas han podido encontrar el lugar en donde sus hijos o hijas fueron enterrados. Pueden celebrar también quizá porque algunas de ellas han encontrado sus nietos o nietas y los tienen con ellas.
Comparando estos textos, que denotan un análisis serio y profundo de los textos bíblicos, en busca del mensaje de Dios y su trascendencia en el hombre, con los del pastor Ureña, vemos con claridad cómo estos últimos son apenas una sarta de patrañas descaradas que no soportan el más mínimo análisis, y que en lugar de buscar el mensaje divino lo que buscan es confundir, desinformar y alejar a los creyentes de la verdad.

Con respecto a los argumentos que afirman que lo que en realidad nos muestra el libro de Job es que Dios es justo, cabe añadir que la noción de justicia está en el corazón mismo del Islam. Dos de los nombres de Al-Lah en el Corán son El Justo y El Juez. “Así pues, si dos grupos de creyentes luchan entre sí, reconciliadles; pero si luego uno de los dos grupos insiste en actuar injustamente con el otro, combatid a aquel que actúa injustamente hasta que vuelva al mandamiento de Dios; y si vuelven, reconciliadles con justicia, y sed equitativos con ellos: pues realmente, Dios ama a los que obran con equidad” Surah 49:9. El musulmán debe actuar de acuerdo a sus posibilidades en contra del mal y de la injusticia. “Si alguien de vosotros ve un mal, que intervenga. Si no puede intervenir, que lo condene con su lengua. Si no puede condenarlo con su lengua, que lo desapruebe en su corazón: Esta es la fe mínima”, Mujámmad. La preocupación por los pobres se ve reflejada en dos mandatos para los musulmanes: Por un lado, dar limosna es una de las obligaciones del musulmán, pero este concepto en el Islam es muy distinto al de muchos cristianos: “Si repartes algo equitativamente entre dos hombres, eso es una limosna. Si ayudas a un hombre a subir a su montura, o a depositar en ella su cargamento, eso es una limosna. Una buena palabra es una limosna. Cada paso que das para dirigirte a la oración es una limosna, y cuando apartas un obstáculo del camino, das una limosna”, Mujámmad. El ayuno durante el mes de Ramadán es también obligatorio para todo musulmán, y tiene tres propósitos fundamentales: Purificar el cuerpo y el alma, formar autodisciplina en el creyente, y hacer que a través de la sed y el hambre, todo creyente tome conciencia de los infortunios que deben padecer los pobres, para que nunca olvide que es su obligación ayudar al necesitado.

A mi parecer personal, estas enseñanzas de los libros sagrados son mucho más importantes y reveladoras de la naturaleza divina de los mismos, que cualquier supuesta información científica que pueda extraerse de ellos.

CONCLUYENDO

Mi conclusión ha quedado clara en varias anotaciones que he hecho a lo largo de este escrito: La Biblia y el Corán no son libros de divulgación científica, y mal hacemos en querer interpretarlos de este modo. Su verdadera misión es mucho más amplia y elevada, su mensaje es mucho más profundo, y su lenguaje está mucho más al alcance de todos. No en vano, la Palabra de Dios está dirigida a todo ser humano, sin distingo de formación académica, condición social, raza, nacionalidad, etc. Cualquiera que desee con honestidad acercarse a la Palabra de Dios, puede abrir su corazón a Él y pedirle sabiduría y entendimiento para captar Su mensaje. No sobra la guía de un conocedor de la materia, mas no se trata de dejar en manos de otro la interpretación de la palabra.

Así como Jesús habló en parábolas (una figura literaria), el Cantar de los Cantares es poesía, y el Apocalipsis es una alegoría, así mismo el texto del Génesis está compuesto por relatos mitológicos que no son científicamente exactos, que no corresponden a una verdad cosmológica, antropológica, biológica, genética ni física. Esto no significa que deban ser rechazados como falsedades absolutas. Significa que tratan de transmitirnos un mensaje que va más allá de las historias que cuentan. Esa es la razón de ser de las formas literarias: ante las limitaciones propias del lenguaje, el autor busca decir cosas que las palabras no pueden decir, y para ello, teje con las palabras diferentes figuras y estructuras que, al ser analizadas en su conjunto y su contexto, transmiten mucho más de lo que las palabras por sí solas nos dicen. Si leemos Ensayo sobre la ceguera, del periodista y escritor portugués José Saramago, premio nobel de literatura en 1.998, nos encontramos con una historia de ficción, algo que jamás ha sucedido y que no parece tener la menor posibilidad de que ocurra en la realidad. Sin embargo, esta novela no constituye una gran mentira. Por el contrario, a través de esta historia ficticia, el autor nos confronta con realidades profundas del ser humano contemporáneo, de nuestra realidad cotidiana, de nuestros temores y de la falsedad de nuestra civilización. El conjunto de la obra nos dice mucho más de lo que nos cuenta la historia de la misma, y la personalidad de cada uno de los personajes que aparecen en la novela (todos ellos ficticios) no obedece a una simple fantasía, sino que se convierte en toda una exploración de la psique humana, que logra tocar al lector en las fibras más sensibles de su ser, desbordando con mucho lo que las palabras nos dicen de esos personajes, y llegando a decirnos cosas respecto a nosotros mismos que ni siquiera aparecen escritas.

Otro ejemplo lo encontramos en esta línea introductoria de la gran obra literaria Paradiso, del escritor cubano José Lezama Lima: "En ese momento, las doce de la noche, se apagaron las luces de las casas del campamento militar y se encendieron las de las postas fijas, y las linternas de las postas de recorrido se convirtieron en un monstruo errante que descendía de los charcos, ahuyentando a los escarabajos". En este simple texto, el autor no nos dice que las bombillas del alumbrado público se puedan transformar en monstruos horribles, nos dice simplemente que la luz espantó a los escarabajos. Pero lo dice de una forma que trasciende las palabras y nos introduce en una atmósfera particular, nos envuelve con la belleza de la composición de estas líneas, de estas frases, y nos involucra, nos hace parte del escenario en el que se comienza a desenvolver una historia. Si interpretamos estas líneas de forma literal, nos reiremos o consideraremos increíblemente inocente o estúpido a Lezama Lima al creer que puede convencernos de la existencia de monstruos que aparecen del alumbrado público. Pero si lo vemos en su real contexto, encontraremos que Lezama tiene el don de pintarnos un cuadro de gran belleza, no utilizando un lienzo y pinturas al óleo, sino unas pocas palabras muy bien entretejidas, y que el conjunto de estas palabras tiene un significado mucho mayor que la simple suma de las significaciones de las mismas.

De la misma forma, me parece absurdo, necio, querer interpretar el Génesis de forma literal y querer hallar en la narración del diluvio una explicación científica real sobre la geología de nuestro planeta. El Génesis (y considero que toda la Biblia) debe ser entendido en su conjunto y en su contexto, para lograr entender el mensaje que nos transmite, y que desborda y trasciende la significación literal de las palabras en que está escrito.

(Continúa...)
 
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La Ciencia y los libros sagrados - Vigésima parte (FINAL)

CONCLUYENDO (continuación)

A este respecto, me parece muy acertado el artículo ¿La biblia y la ciencia concuerdan?, publicado por el Instituto Para Estudios Bíblicos y Científicos y traducido al español por un bioquímico y maestro de historia de la música, el anabaptista chileno Felipe Elgueta Frontier. Este artículo analiza algunos de los alegatos sobre correlación entre Biblia y ciencia que hacía el ingeniero hidráulico y profesor universitario estadounidense Henry Morris en su libro Las Bases Bíblicas de la Ciencia Moderna, publicado en 1.984. Morris, fundador del Instituto para la Investigación de la Creación (entidad privada sin ánimo de lucro que exige a todos sus miembros una confesión de fe sobre el fijismo de las especies creadas, la universalidad del diluvio y la realidad histórica de la Creación según el Génesis; de la cual es miembro el pastor Ureña), considerado el padre del creacionismo moderno, se aferraba a la doctrina de la Infalibilidad de la Biblia de forma radical, fundamentalista. En este libro, Morris explica y defiende las supuestas correlaciones entre la Biblia y la ciencia que ha publicado Ureña a título propio (¿estamos ante un caso de plagio, o todos los miembros del Instituto pueden publicar como suyas las ideas de Morris?) y otras más. El mencionado artículo que analiza el libro de Morris, es un texto de autoría cristiana protestante que desmiente algunos de los argumentos publicados por Morris para asociar textos bíblicos con descubrimientos científicos, de manera que constituye un excelente complemento al presente escrito. En la introducción del artículo puede leerse:
Henry Morris ha escrito un libro titulado "Las Bases Bíblicas de la Ciencia Moderna ("The Biblical Basis for Modern Science", 1.984). En él intenta demostrar que ciertos versículos de la Biblia contienen verdades científicas que sólo ahora somos capaces de entender totalmente, gracias a la ayuda de la ciencia moderna. En este artículo mostraremos el estudio de algunos versículos importantes para ver cómo sería una interpretación apropiada.

Henry Morris es culpable de buscar nuestra ciencia contemporánea en la Biblia. Esto se llama eiségesis. Pero lo que se necesita es exégesis. Para conocer el significado correcto de una palabra en la Biblia, ¿debemos consultar el diccionario Webster o remontarnos a los idiomas originales hebreo, griego o arameo? El intento por encontrar el significado original se llama interpretación gramático-histórica de la escritura. Por ejemplo, cuando el apóstol Pablo usó la palabra "ley", no estaba refiriéndose a la Constitución de los Estados Unidos.

Hubo un tiempo en que los teólogos pensaban que el idioma del Nuevo Testamento era un griego especial "santo". Esto fue hasta que los estudiosos descubrieron que se trataba del idioma común de aquella época. Esto plantea la segunda objeción a la interpretación de Morris: la mayoría de los versículos que Morris considera como ciencia moderna son palabras y frases que eran usadas comúnmente por otras naciones en aquel tiempo. Examinaremos algunos de estos pasajes.

La tercera objeción es que varios de estos versículos son sólo expresiones poéticas de sentido común y no pretenden contener verdades científicas ocultas. En Isaías 51:6, la tierra envejece como un vestido. ¿Isaías está intentando comunicar la segunda ley de termodinámica en este versículo? Que las cosas envejecen es parte del conocimiento común, no de una ciencia sobrenatural.

La cuarta objeción es que varios de estos versículos están basados en una pobre traducción de ciertas palabras desde el idioma original al inglés. Ha habido varios descubrimientos importantes de textos antiguos desde la traducción de la Biblia King James de 1.611, que nos ayudan a entender mejor los idiomas originales de la escritura. Un descubrimiento importante fue la antigua ciudad de Ugarit. Se descubrieron varias tablillas con escritura cuneiforme. Un análisis mostró que este nuevo idioma ugarítico era muy cercano al hebreo. Por ello, el ugarítico nos puede ayudar a entender mejor ciertas palabras hebreas (Craigie 1.983; Curtis 1.985; Coogan 1.978).

La última objeción es que la Biblia no es un libro de ciencia. 2 Timoteo 3:16 establece claramente que la Biblia está inspirada por Dios para que sea útil para la instrucción en la rectitud, no para la instrucción en la ciencia. Gran parte de la Biblia es poesía. Tomar un poema y convertirlo en un texto científico es un error. Debemos comprender los diferentes géneros literarios de la Biblia. Debemos entender el contexto histórico y el significado del idioma original en que se escribió la Biblia.
Los libros de Morris han sido duramente criticados por utilizar citas fuera de contexto o incluso modificarlas a propósito. También se le acusa, como a muchos creacionistas, de basar sus teorías no en el trabajo científico, sino en procurar echar por tierra las ideas evolucionistas, planteando simplemente que la evolución y la creación son mutuamente excluyentes, cosa que no es cierta en realidad. El artículo El creacionismo, el evolucionismo y la Biblia nos dice al respecto:
La realidad es que la evolución como hecho científico y la creación divina se encuentran en dos planos diferentes: no existe la alternativa evolución-creación, como si se tratara de dos posturas entre las que hubiera que elegir. Se puede admitir la existencia de la evolución y, al mismo tiempo, de la creación divina. Si el hecho de la evolución es un problema que ha de abordarse mediante los conocimientos científico-experimentales, la necesidad de la creación divina responde a razonamientos metafísicos. En sentido estricto, creación significa "la producción de algo a partir de la nada". En ningún proceso natural se puede dar una creación propiamente dicha: los seres naturales, desde las piedras hasta el hombre, sólo pueden actuar transformando algo que ya existe. La naturaleza no puede ser creativa en sentido absoluto. El hecho de la creación, así entendido, no choca con la posibilidad de que unos seres surgieran a partir de otros.

Evolución y creación divina no son necesariamente, por tanto, términos contradictorios. Podría haber una evolución dentro de la realidad creada, de tal manera que, quien sostenga el evolucionismo, no tiene motivo alguno para negar la creación. Dicha creación es necesaria, tanto si hubiera evolución como si no, pues se requiere para dar razón de lo que existe, mientras que la evolución sólo se refiere a transformaciones entre seres ya existentes. En este sentido, la evolución presupone la creación. Pero es que, además, quien admite la creación —así entendida—, tiene una libertad total para admitir cualquier teoría científica. Quien no admita la creación, necesariamente deberá admitir que todo lo que existe actualmente proviene de otros seres, y éstos provienen de otros, y así sucesiva e indefinidamente, de manera que todos y cada uno de los seres que existen deben tener un origen trazado por la evolución. Aunque pueda resultar paradójico, es el evolucionista radical quien viola las exigencias de rigor del método científico, pues se ve forzado a admitir unas hipótesis que no pertenecen al ámbito científico, y deberá admitirlas aunque no pueden probarse.

No hay, por tanto, necesidad de plantear ningún conflicto entre ciencia y religión. Esto es lo que postulan, al menos, destacados científicos evolucionistas. John McIntyre, profesor de Física en la Universidad de Texas, confiesa la frustración que experimenta por el hecho de que los "antievolucionistas" hayan usurpado el término "creacionismo", e insiste en que es del todo posible conciliar las creencias cristianas en un Dios creador con la idea de que la vida haya evolucionado a través del tiempo. Por su parte, el paleontólogo neodarwinista G. G. Simpson, asegura:

"Ningún credo, salvo el de las fanáticas sectas fundamentalistas —que son una minoría protestante en EE.UU. —, reconoce por dogma el rechazo de la evolución. Muchos profesores, religiosos y laicos, la aceptan, en cambio, como un hecho. Y muchos evolucionistas son hombres de profunda fe. Además, los evolucionistas pueden ser también creacionistas".

Y Martin Gardner, colaborador habitual de la revista Investigación y Ciencia, creador de juegos matemáticos y autor de libros de divulgación científica de calidad, sostiene: "No conozco ningún teólogo protestante o católico fuera de los círculos fundamentalistas que no haya aceptado el hecho de la evolución, aunque puede que insistan en que Dios ha dirigido el proceso e infundido el alma a los primeros seres humanos".
La siguiente cita de Morris, ha servido de base para duras críticas por parte de los científicos, pues niega por completo la validez del Método Científico, lo que se utiliza para desestimar sus publicaciones como frutos del trabajo científico: "Es más productivo tomar literalmente la Biblia y luego interpretar los hechos reales de la ciencia dentro de su marco de trabajo dado por revelación", Henry Morris, en Troubled Waters of Evolution, 1.974.

La búsqueda de la verdad a partir de la Biblia (o del Corán), es válida, pero un mal planteamiento, o un marcado subjetivismo, dan lugar a la tergiversación y el camino ya no conduce a la verdad. Es lo que ocurre con el pastor Ureña: interpretar la Biblia, partiendo del supuesto de que ésta debe ser leída de forma literal, negando su carácter literario, desconociendo el contexto histórico en el que fue escrito cada libro que la compone, y dejando de lado la tradición judía de la cual proviene para considerarla como un tratado de divulgación científica, es emprender un camino que está errado desde el inicio. Por el contrario, la teología seria, rigurosa, es tan científica como la genética. Estoy completamente de acuerdo en que es posible una armonía entre ciencia y religión, y que por tanto, es posible el trabajo científico conjunto desde ambos planteamientos.

Hemos visto que los postulados del pastor Dawlin A. Ureña, no son originales, sino textos reciclados de los libros de Morris y de la doctrina del Instituto para la Investigación de la Creación. Ureña ha sido denunciado por publicar falacias contra el Islam, en una actitud desinformativa y promotora de discriminación y violencia entre las religiones. Sus declaraciones son siempre incendiarias y promotoras de la destrucción, como ésta publicada el 3 de abril de 2.007, a propósito de la crisis entre Inglaterra e Irán por los soldados británicos capturados en aguas iraníes:
"Pronto dejarán de ser rumores de guerra, las armas de gran alcance y destrucción masiva ya están listas en diferentes lugares, hay pólvora regada y maldad por todos lados, solo falta que alguien prenda la mecha para dar inicio al fuego de la guerra y que se quite la paz mundial y aparezca la muerte en todas partes con horror y tragedias incalculables. ¡Armagedón más cerca!
Parece que los únicos intereses de Ureña son promover la pronta llegada del Apocalipsis (alentando al mundo a que se autodestruya, y para ello, alentando a los fieles cristianos a que se enfrenten contra todas las demás religiones —hay que ver cómo sataniza por igual a rastas, adventistas, católicos, musulmanes, mormones, testigos de Jehová y pentecostales—), y mientras llega el Fin, vender su librito "¿Creación o Evolución? ", que promociona con insistencia en su Web. Olvida Ureña que es mandamiento de Dios el amor, no sólo al prójimo, sino también al enemigo, y actuar con justicia:

  1. "Hombre, él te ha declarado lo que es bueno, lo que pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, amar la misericordia y humillarte ante tu Dios", Miqueas 6:8.

  2. "El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la Ley es el amor", Romanos 13:10.

  3. "Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os odian y orad por los que os ultrajan y os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos y llover sobre justos e injustos. Si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto", Mateo 5:44-48.
Ureña parece más bien un agente del mal, infiltrando la conciencia de los fieles cristianos para arrojarlos a un Armagedón físico, mundial, nuclear. O quizás sus técnicas de terrorismo sicológico no tengan otro fin que el de crear pánico y, con ello, crear el mercado target ideal para vender sus libros, discursos y sermones. Aunque también es posible que, como aseguran algunos, Ureña no exista, y se trate de un staff de fundamentalistas cristianos estadounidenses que, a través de este personaje, llevan a cabo su estrategia de expansión de las ideas puritanas ortodoxas a Latinoamérica. Aunque yo tengo serias dudas respecto a esa última idea. Aún creo en el intelecto del hombre; se me hace difícil aceptar que alguien sea tan obtuso y mediocre como Ureña, mucho menos puedo creer que todo un staff muestre tan bajo nivel intelectual.

***​

Bien, aquí termino con este (quizás demasiado) extenso artículo (o ensayo o lo que sea), dedicado a analizar la supuesta correspondencia entre la Biblia y la Ciencia, y relacionarla con el Corán y, en menor medida, con otros libros sagrados. Espero que la información consignada en este texto resulte de alguna utilidad (al menos yo aprendí mucho escribiéndolo).

Para finalizar, quiero manifestar ya de forma absoluta, mi oposición al pastor Ureña, enviando un abrazo fraternal y sincero a todos mis hermanos judíos, cristianos, musulmanes, y de cualquier credo (o ausentes de él), porque son mis hermanos, en Cristo, en Dios, en la genética, en la historia... Mal puede alguien negar la hermandad entre los seres humanos. Que la búsqueda del conocimiento nos mantenga siempre activos, unidos en nuestra necesidad de saber más, y que nuestra necesidad de paz y armonía nos ayude a encontrar en nuestros libros sagrados, en nuestro intelecto, en nuestro corazón, el camino de la convivencia pacífica, armónica, solidaria, justa y sincera.
 
nada de lo que digamos aqui nos pondra de acuerdo siempre habra quien quiera imponer su manera de pensar o de analizar las cosas segun su criterio, coincidencialmente ayer estuve conversando con un judio y me decia el que nosotros los cristianos siempre hemos creido que a jesucristo lo crucificaron de pie, pero como muchos saben el apostol pedro fue crucificado boca abajo y segun me dice este señor los romanos nunca crucificaban a alguien de pie, entonces porque a jesus lo habrian de crucificar de pie. no sera que nos vendieron esa idea porque es mas bonita?

como dice el mucha de las cosas que el mundo occidental cree es porque la iglesia catolica atraves del tiempo no lo ha hecho creer a nosotros y para eso tenemos un problema,nosotros, nuestros antepasados, todos crecieron creyendo lo mismo. yo no cuestiono el creer en jesus y mucho menos en Dios, pero hay cosas que me hacen pensar, como hasta que punto lo que nosotros creemos es verdad.
no sera que jesus fue un ser humano como cualquiera y tuvo sus hermanos ? esposa e hijos el que esto hubiera sido asi lo hace diferente ? dejaremos de creer en el ? no lo creo porque igual que otras religiones creen en lo que creen nosotros creemos en un Dios vivo que se hizo hombre, pero yo creo que si la iglesia aceptara que jesus fue un mortal mas con nuestras mismas debilidades nos acercaria mas.
 
ZAMURAY dijo:
nada de lo que digamos aqui nos pondra de acuerdo
En eso estoy de acuerdo. Pero ese no es el objetivo (al menos no el de mi ensayo). En lo personal, sólo busco analizar desde la ciencia, los argumentos que expone el pastor Ureña para defender su idea de que la Biblia es científicamente correcta, y al hacerlo, cuestionar nuestra forma de interpretar los libros sagrados. Lo importante no es convencer a nadie ni ponernos todos de acuerdo, sino cada quien analizar profundamente su visión de los libros sagrados y su relación con ellos.

ZAMURAY dijo:
como dice el mucha de las cosas que el mundo occidental cree es porque la iglesia catolica atraves del tiempo nos lo ha hecho creer a nosotros y para eso tenemos un problema,nosotros, nuestros antepasados, todos crecieron creyendo lo mismo.
Una cosa sí es cierta. Históricamente, fue el catolicismo la religión que se hizo oficial en el Imperio Romano y sus dos vertientes (oriental ortodoxa y occidental romana) fueron las únicas versiones (muy similares entre sí) del cristianismo que existieron durante siglos. Si bien la Reforma lo que buscaba era reencontrar la verdadera esencia del cristianismo, todas las iglesias cristianas que existen hoy día parten de la Biblia que fue recopilada por la Iglesia Católica y de sus doctrinas fundamentales. De modo que ninguna iglesia cristiana actual puede reclamarse como la original, ni tiene verdadero conocimiento de las primeras formas y creencias del cristianismo.

ZAMURAY dijo:
no será que jesus fue un ser humano como cualquiera y tuvo sus hermanos ? esposa e hijos el que esto hubiera sido asi lo hace diferente ? dejaremos de creer en el ?
Hay expertos que en efecto dudan de que Jesús se hubiera mantenido célibe. Hoy día es ampliamente aceptado que tuvo hermanos. Y muchos expertos, basados en documentos muy antiguos, aseguran que los primeros cristianos no consideraban a Jesús como Dios encarnado ni hablaban de la Trinidad, sino que tenían a Jesús como un profeta mesiánico, pero humano. De hecho, el Islam asegura que Dios es único e indivisible, no ha engendrado ni ha sido engendrado, y que Jesús fue su profeta pero no su encarnación. Sin embargo, cada iglesia tiene sus propias doctrinas al respecto.

Actualmente, sólo los Testigos de Jehová niegan la divinidad de Jesús. La mayoría de las iglesias cristianas no sólo lo aceptan como Dios encarnado, sino que aceptan la doctrina de la Trinidad. Y con la polarización del mundo, debida a la utilización que los gringos han hecho de los medios para asociar directamente al Islam con los grupos fundamentalistas árabes minoritarios (como si no hubiera fundamentalismo judío y cristiano), algunas iglesias han tomado la creencia en la divinidad de Jesús como una bandera contra el Islam, al que llaman hereje y hasta satánico.

Así que el asunto religioso, como siempre, tiene sus implicaciones políticas.
 
amigos mios yo estaba analizando algo, el reconocido padre lineros el tiene un lema "el man esta vivo" bueno me parece que no tenemos el mas minimo derecho a tratar de poner a Dios a nuestro nivel, pues recordemos que el es superior en todo ahora no creo que nadie le va a decir al papa "oye man" ni aun en la costa seguramente si tu hijo te dice asi le das una reprimenda pues es un costumbrismo costeño pero entre amigos o en forma de vulgarismos, por otra parte dentro de el ensayo escrito en este foro el cual reconozco esta muy bien fundamentado , pero le falto algo un detalle especial nosotros no podemos poner a Dios dentro de las leyes fisicas pues el esta mas alla de toda ley fisica utilizada por el hombre y todas las demas formas de vida que hay o que puedan haber o cuantos milagros y cosas inexplicables han sucedido a traves de los tiempos y aun no tiene explicacion, yo soy conciente que el pastor ureña se equivoco en la forma como trato este foro pero de alli a desconocer que Dios esta por encima de todos nosotros pues como dije ninguna ley fisica se puede ubicar dentro de los parametros de Dios y como dice una cancion de alex campos "miro al cielo y miro al mundo y prefiero estar con el" la verdad y de todo corazon prefiero arriesgasrme con nuestro Señor Jesucristo http://www.youtube.com/watch?v=sunpj8RWnoI
por otro lado hay muchas cosas que la ciencia no ha probado ejemplo
http://desgraciashumanas.blogcindario.com/2006/07/00185-ooparts.html
 
dittto dijo:
nosotros no podemos poner a Dios dentro de las leyes físicas pues el está mas allá de toda ley física
Como explico en mi ensayo, mi interés en ningún momento es negar la existencia de Dios; éste se basa en la siguiente premisa:

El pastor Ureña, así como muchos cristianos, asegura que existe una correlación directa entre la Biblia y la ciencia, entendida como información científica verificable por las ciencias modernas, y que se obtiene al interpretar de forma literal el texto bíblico. Al decir lo anterior, se está avalando a la ciencia como veraz y verificable a través de la Biblia, así como lo inverso. Si existe dicha correlación, significa que las leyes físicas fueron establecidas por Dios y que Él mismo las respeta. Igualmente, si existe dicha correlación, significa que los descubrimientos que hace el hombre a través de la ciencia, lo acercan más a su conocimiento de la Creación y del Creador.

Ahora bien, mi ensayo es concluyente en el sentido de que la interpretación "literal" que hace Ureña de las Escrituras, es errada, acomodada, maniquea y desinformativa, a más de llegar a ser blasfema en algún punto. Mi posición, además, es clara respecto a la correlación entre la Biblia y la ciencia: La Biblia no es un libro de divulgación científica, y tratar de acomodar su interpretación a la evidencia científica moderna, es una necedad. La Biblia debe ser interpretada a la luz de su contexto: la época, la lengua y la cultura que produjo cada libro, así como el estudio de las variaciones literarias que indican si tuvo uno o más autores. Y por supuesto, a la luz de una relación espiritual profunda con Dios y su mensaje.

Otra cosa es que la información de la Biblia puede y debe ser corroborada a través de la ciencia social: No es que la Biblia nos de información científica, sino que la arqueología y la historia pueden corroborar que los relatos bíblicos corresponden a culturas reales, que hablan de ciudades y personajes que existieron, y de mitos que nos hablan de la tradición cultural judía. Caso contrario al del Libro de Mormón, que no puede ser corroborado de ninguna forma porque es el producto de la imaginación del fundador de la iglesia mormona. Lo anterior significa que no niego una correlación entre Biblia y ciencia, sino que lo absurdo es tratar de buscar revelaciones científicas en una interpretación de la Biblia que se dice "literal", pero que en realidad es acomodada y fuera de contexto.

En efecto, aún hay muchas cosas que la ciencia no ha podido explicar, pero el objetivo de la ciencia no es explicarlo todo, sino encontrar los principios que rigen el universo. Muchas cosas que no tenían explicación hace 30 años, hoy son enseñadas en los colegios. Teorías que hace 50 años eran una novedad increíble, hoy son conocidas y todos disfrutamos de sus aplicaciones prácticas. Por supuesto, siempre habrán preguntas, mientras más sabemos, más inquietudes surgen. Afortunadamente.

Por último, es decisión de cada quien si quiere creer en algo a ojo cerrado, o si siente la necesidad de indagar más, de profundizar, de conocer, para darle un sustento no sólo espiritual y de fe, sino también racional, intelectual, a sus creencias. El que cree a ojo cerrado puede creer que el Libro de Mormón es revelación divina que nos entrega información real y fidedigna, y está en su derecho de hacerlo. El que investiga más profundamente, descubre que cada cosa hay que analizarla e investigarla, y sopesarla con la propia espiritualidad. Mi ensayo está dirigido a estas segundas personas.
 
karmander dijo:
Exite alguna otra fuente que no sea la biblia?


no somos los primeros

es de esos libros que muestran un fosil de mamut con un tiro en la frente
ruinas con piedras cortados con laser y amarradas con acero fundido
descripciones muy exactas de viajes al espacio, armas nucleares, explosiones nucleares, antes y despues...
descripcion de los efectos de la radiacion en humanos
etc etc
eetc

Los viajes de gulliver
los cientificos le cuentan de las lunas fobos y deimos, con sus medidas , orbitas y distancias exactas, mucho antes de ser "descubiertas" por la ciencia
 
Señor §en§ei Ħaφnu§ permitame felicitarlo pr tan completo y bien detallado ensayo, y sobretodo documentado, en el pasado yo tambien e escrito ensayos para este foro referentes a la religion pero lejos tan trabajados, el suyo simplemente me dejo pasmado pues es contundente al extremo, de nuevo señor le condono mis felicitaciones y su ensayo sera uno de mis documentos indispensables a tener guardados como referencia a estos temas.

salu2.
 
lagarworks dijo:
Los viajes de gulliver
los cientificos le cuentan de las lunas fobos y deimos, con sus medidas , orbitas y distancias exactas, mucho antes de ser "descubiertas" por la ciencia
En efecto, una de las cosas que concluyo en mi ensayo, es que el afán de querer "ver" verdades científicas en un texto, puede hacer que uno encuentre datos supuestamente fieles al conocimiento científico moderno, escritos hace siglos, no sólo en los libros sagrados sino en otros textos. Uno podría interpretar, por ejemplo, al Quijote de la Mancha y varias obras de Shakespeare como tratados sobre la sicología, la parasicología y el estudio de lo onírico, sorprendentemente fieles a los descubrimientos de Freud.

Por ello, cada obra, incluyendo los libros sagrados, debe ser entendida y analizada dentro de su propio contexto, de acuerdo a la época, el pueblo y el lenguaje en que fue escrita.

[SWF] Vindikator dijo:
le condono mis felicitaciones y su ensayo sera uno de mis documentos indispensables a tener guardados como referencia a estos temas.
Me satisface profundamente saber que mi ensayo le resultó verdaderamente útil. Ojalá a muchas más personas les sirva también. Gracias por su apoyo.
 
Hace unos meses leí que los medios de comunicación anunciaron un nuevo “hallazgo dramático” que trastorna las ideas anteriores sobre “la evolución humana”. Un periódico sudafricano describió el hallazgo de cuatro huesos de pie incompletos, como un “dramático hallazgo fósil”. Que estos escasos hallazgos puedan modificar radicalmente las ideas de los evolucionistas, demuestra la naturaleza débil de sus varias hipótesis. Que los expertos en fósiles aún se emocionen tanto por unos cuantos fragmentos de hueso, muestra cuan débil es la evidencia evolucionista de la historia.
Es absurdo que se quiera hacer grande algo tan pequeño. Parece que ha habido poco cambio desde los días del “hombre de Nebraska” ( Haroldcookii hesperopitecus), publicado en 1992, donde el periódico Illustrated London News publicó el dibujo de un artista sobre una familia entera de hombres-simio, ¡basado en el hallazgo de un solo diente! Unos años más tarde, se encontró que el diente pertenecía a un pécari, un animal parecido a un jabalí pequeño; pero eso no hizo noticia en los titulares de los periódicos como el “descubrimiento del hombre de Nebraska”.

Hay una lista larga de hombres-simio difuntos. El hombre de Neandertal encabeza la lista. Los evolucionistas aclamaron los restos encontrados en 1856 como el antepasado del hombre, pero ahora se admite que la postura supuestamente encorvada era debida a enfermedad (raquitismo), y el Neandertal es realmente sólo una variante del género humano.

Por supuesto, también debemos recordar la mentira más infame: el fraude del hombre de Piltdown. Los evolucionistas usaron al hombre de Piltdown para "educar" a los estudiantes acerca del "hecho" de la evolución humana durante 40 años, antes que el engaño fuese finalmente expuesto.

Otros hombres-simio obsoletos incluyen al Ramapitecus, Sivapitecus, varias especies de Australopitecus, y otros que ahora han sido abandonados. Dada la publicidad de los reclamos hechos por paleontólogos acerca de estos fósiles, forzó a la gran mayoría de la gente a aceptar la evolución humana como un hecho. Los medios de comunicación saludan los nuevos "descubrimientos" con gran fanfarria, pero la defunción de los anteriores tiende a ser ignorado, dejando a la gran mayoría de las personas con la impresión de que la evolución humana es un hecho.
No parece haber gran diferencia desde los días del “hombre de Nebraska”. En 1994 los periódicos, e incluso la televisión, ávidamente informó el hallazgo del “hombre de Boxgrove” en una cantera en Boxgrove, Inglaterra. Se suponía que este era un antepasado de los europeos. La mayoría de los informes incluyó la reconstrucción de un artista de lo que el hombre de Boxgrove podría haberse parecido – una criatura con aspecto simiesco. Éste fue “creado” de un pedazo de tibia, y un artículo publicado en la revista en Nature 1 dando crédito a la historia. El fragmento de tibia se parecía a una tibia humana ordinaria, pero El Sydney Morning Herald del 19 de mayo de 1994 llamó a esto “uno de los hallazgos más importantes en la historia de la evolución humana”.

¿EL ESLABÓN PERDIDO?

Al “eslabón perdido” ( ramidus Australopitecus) se le dio vasta publicidad después de la publicación de un artículo publicado en la revista Nature 2 en 1994. ¿Qué fue encontrado? Diez dientes en un sitio, un par de huesos fragmentados de las extremidades a 270 metros de distancia, dos fragmentos muy masticados de la base de un cráneo encontrados a 550 metros de distancia, y otros pocos pedazos encontrados en la superficie del suelo a más de 1.5 kilómetros aparte.
¿Cómo saben los paleontólogos que todas estas piezas pertenecieron a la misma clase de animal? ¡Ni ellos lo saben! Un diente relativamente intacto encontrado a 1.5 kilómetros del conjunto principal de 10 dientes fue investigado detalladamente, encontrando que es indistinguible en todas las medidas al diente de un chimpancé.

Aunque los fósiles fueron encontrados en la superficie del suelo, se les dieron una edad de 4 millones de años basado en la “datación” de las rocas cercanas. Las rocas más cercanas a los fósiles fueron “datadas” en 23 millones de años, pero los paleontólogos eventualmente encontraron algunas rocas a mayor distancia que dieron una “fecha aceptable” (una fecha que ayudaría a calificar su hallazgo como “el eslabón perdido”).

“PIE PEQUEÑO”

“Pie Pequeño” es uno de los últimos fósiles "homínido" reportado en los periódicos. Basado en cuatro huesos del pie, dos paleontólogos sudafricanos afirmaron que ellos habían descubierto un homínido que muestra la transición de un pie de simio del tipo empuñado al tipo humano 3 . Ellos especulan de esto, que estas criaturas habrían pasado algo de su tiempo "en los árboles". Se supone que estos fósiles tienen 3.5 millones de años basado principalmente en la edad “conocida” de otros fósiles encontrados en los alrededores. Ellos, además de eso, especulan que el pie perteneció a un “antiguo” australopitecino.

Un pie humano tiene 25 huesos. Los paleontólogos Clarke y Tobias encontraron dos huesos más o menos intactos y dos huesos incompletos. Los huesos se excavaron originalmente en 1980, pero no fue sino hasta 1994 que Clarke "juntó todas los piezas” 4 . La nota 5 al pie de página en el artículo sugiere que los fragmentos fueron recuperados de un basurero de escombros de cal dejados por trabajadores. Los pedazos difícilmente podrían haberse encontrado juntos, entonces, ¿cómo pueden ellos estar seguros que los huesos realmente van juntos? De esto, ellos construyeron su historia especulativa. Un evolucionista escéptico, Owen Lovejoy, en un artículo al respecto publicado en la revista Sc ience 5 , escribió: "Su conclusión, (que el pie pudiera asirse y por tanto su dueño pasó algo de su tiempo en los árboles), es patentemente absurdo”. La escuela de Lovejoy cree que los australopitecinos de ese tiempo eran completamente moradores de la tierra. Es una lástima que los evolucionistas no puedan ser un poquito más escépticos en todas los reclamos asociados con unos cuantos trocitos y pedazos de esto y de aquello, especialmente, cuando contradice sus propias teorías.

El informe del periódico The Star dijo, "Un rasgo emocionante de Pie Pequeño es que su dedo del pie grande no convergente encaja con la posición del dedo del pie grande en las huellas fósiles de Laetoli." Tobias, uno de los autores del artículo del Science dijo, "Ahora, por primera vez, tenemos el tipo de pie fósil que habría hecho tales huellas." Russell H. Tuttle de la Universidad de Chicago hizo un estudio detallado de las huellas de Laetoli las cuales se supone que tienen 3.7 millones de años. Él escribió: "En rasgos discernibles, las impresiones G de Laetoli son indistinguibles de aquellas del habitualmente descalzo Homo sapiens” 6 . Esta conclusión vino de un estudio detallado de más de 70 indios de Machiguenga, un grupo de gente habitualmente descalza de Perú. Tuttle y Webb escribieron: “Las formas de las huellas de Laetoli G-1 y de los de Machiguenga en terreno arenoso húmedo, ilustra además la notable humanidad de los pies de los homínidos Laetoli en todos los rasgos morfológicos perceptibles”.

En otras palabras, no hay ninguna base para decir que ellas pudieran ser otra cosa más que huellas humanas; y no es otra cosa más que la creencia en la evolución que previene al evolucionista a admitir que los humanos existían en aquel "entonces", debido a su fe en sus sistemas de datación y su historia evolutiva.
El artículo original sobre “Pie Pequeño” en la revista Science está desprovisto de algunos de los reclamos más exagerados publicados en los artículos de periódicos populares, pero tiene mucho de especulación. Comparando la fotografía de los huesos publicados en The Star con la publicada en Science, sugiere que los autores han arreglado los huesos para la fotografía de Science para hacerlos parecer que ellos se mueven mejor de lo que en realidad lo hacen. También, mucho del argumento acerca de la naturaleza simiesca de los huesos está basado en el supuesto despliegue del primer dedo del pie. ¿Cuán fuerte es esta afirmación? Los huesos parecen ser cambiados de sitio ligeramente en la fotografía de Science para acentuar el despliegue del dedo del pie hacia la derecha. El hueso del talus está aparentemente incompleto.

¿A quién, entonces, pertenecieron los fragmentos de hueso, si estos son parte de un mismo conjunto? Los huesos del pie pueden variar considerablemente dentro de las especies. Los pies humanos calzados o descalzos lucen bastante diferentes. Sería interesante comparar los fragmentos encontrados con otros diferentes de humano, de chimpancé y de huesos de pie del australopitecino, y no sólo aquellos escogidos por los autores y posiblemente arreglados para las fotografías de tal manera como para sostener su argumento. Pero, entonces, con tan pocos fragmentos de hueso para proseguir, ¿quién puede estar seguro justo a quién pertenecen?

Todo esto me recuerda la declaración hecha por Nigel Hawkes en The Times (Londres), 23 de septiembre, 1995: "Pocas ciencias producen tanta información de tan pocos fragmentos como la paleontología”. Recuerde esto cuando vea el próximo informe del periódico de algún nuevo hallazgo del "homínido" fósil. Usted tiene derecho a ser escéptico.

Han habido teorías evolucionistas desde antes de que la teoría de Darwin fuera publicada en 1859. El propio abuelo de Charles Darwin publicó uno. Algunos filósofos griegos antes de Cristo adoptaron ideas evolucionistas.

¡Los titulares!

Artículos de periódicos y revistas anuncian a menudo el hallazgo de nuevos fragmentos de hueso como otro “eslabón perdido”. En muchos casos, si usted pudiera ver los verdaderos pedazos, usted se preguntaría ¡cómo se puede hacer tanto de tan poco! Al público a menudo se le deja con la impresión que hay montañas de evidencia para apoyar la teoría que el hombre vino de algún ancestro simiesco. Hay, sin embargo, mucho más razón para creer que el hombre fue creado como un complejo ser viviente desde el mismo comienzo, justo como se nos dice en la Biblia.

¿Qué hay sobre el Hombre de Java?

Eugenio Dubois, un médico Holandés inspirado por el infame Haeckel y su imaginario “hombre-simio mudo”, fue a Java en 1887 determinado a encontrar el “eslabón perdido”. Resultó el "Hombre de Java", todo esto lo derivó de unos cuantos dientes, un casco de cráneo y un hueso de una pierna, encontrados en Indonesia en 1891 y 1892. El hueso de pierna fue encontrado a 14 metros (45 pies) del casco de cráneo, pero los dos fueron unidos para hacer al “eslabón perdido”. El hueso de la pierna se parece a un hueso humano ordinario, aunque el casco de cráneo difiere del promedio del tipo humano. Debido a las similitudes a los humanos ordinarios, el Pitecantropus erectus (“hombre-simio erguido”), como los paleontólogos una vez lo conocieron, es ahora el Homo erectus (“humano erguido”). Los fósiles del Homo erectus han sido encontrados en los mismos estratos como los fósiles del tipo humano promedio, así que ellos parecen ser simplemente una variante del tipo humano, no un antepasado.

Podríamos seguir nombrando casos que dejan en evidencia la poca credibilidad que tiene la ciencia en especifico la paleontología, que siempre se muestra como indesmentible, pero a la luz de todos estos antecedentes analizados y citados en este artículo, la teoría de la evolución, queda absolutamente cuestionada.

"En el principio creó Dios los cielos y la tierra" (Génesis 1:1)

"Porque por Él fueron creadas todas las cosas que están en los cielos, y que están en la tierra, visibles é invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por Él y para Él." (Colosenses 1:16).

“Dice el necio en su corazón, no hay Dios” (Salmos 14:1)
 
Señor, el origen del hombre es una de las incontables dudas que nos atañen, la evolucion es demostrada en otros organismos pero como bien señala en cuanto al hombre nos falta el "eslabon perdido" y como bien apunta a habido incontables allasgos falsos por parte de "arqueologos" que solo busan fama y fortuna (no solo a habido falsificaciones en cuanto a esto tambien en cuanto a dinosaurios y arte antiguo), pero con el tiempo caen bajo su propio peso de mentiras, pero vamos si usted quire creer que un ser magico nos creo, que la tierra solo tiene 10000 años como afirman los ortodoxos, y que la lepra se cura quemando las postulas del enfermo pues adelante esta en su derecho(bien podriamos ser decendientes de extraterrestres que se estrellaron en este planeta ¿quien lo sabe?), ahi es donde se difiere de la ciencia la ciencia no "cree" aun cuando a encontrado una verdad la escrutiña hasta la ultima instancia y si esta equivocada no tiene ningun recato en decir que estaba mal y prosigue sus investigaciones.

salu2.
 
amén.. prefiero creer en la teoria de la evolución que en la fe ciega, prefiero seguir buscando que creer en la "verdad absoluta".
 
Realmente...estoy impresionado por la forma en que algunas personas tratan a toda costa afirmar que sus afirmaciones o sus creencias son las verdaderas...señores nadie tiene la verdad en sus manos...nadie absolutamente nadie..pongamonos a estudiar y no nos enfrasquemos en que lo que decimos es la verdad absoluta...yo personalmente creo que la biblia es un libro trastocado muchas veces por reyes y emperadores para tener subyugado al pueblo...hoy en día eso no ha cambiado en lo absoluto..los religiosos se siguen aprovechando de la biblia para hacer a sus antojos lo que les venga en gana...siempre y cuando ellos sean los gananciosos..los santos y los únicos que vana a ir al cielo....
 
matemaniatiko12 dijo:
Realmente...estoy impresionado por la forma en que algunas personas tratan a toda costa afirmar que sus afirmaciones o sus creencias son las verdaderas...señores nadie tiene la verdad en sus manos...nadie absolutamente nadie..pongamonos a estudiar y no nos enfrasquemos en que lo que decimos es la verdad absoluta...yo personalmente creo que la biblia es un libro trastocado muchas veces por reyes y emperadores para tener subyugado al pueblo...hoy en día eso no ha cambiado en lo absoluto..los religiosos se siguen aprovechando de la biblia para hacer a sus antojos lo que les venga en gana...siempre y cuando ellos sean los gananciosos..los santos y los únicos que vana a ir al cielo....
agree 100%
 
CÓMO QUE NO hay verdad?? no era la del corán?
... o será la verdadera religión la de los mormones, como en south park...?

por favor, el man que editó la biblia era un DIOS de la publicidad.
... y el que le agregó el update "nuevo testamento 2.0" también.
 
En la época que se escribió la biblia se hablaba de "cielo y tierra" como los dos elementos preponderantemente opuestos. Eso se daba producto del punto de vista del hombre de la época, quien no había salido de nuestra atmósfera para comprobar que esa apreciación era absolutamente errada y viciada de la ignorancia o más bien, ausencia de tecnología que le permitiese acceder a pruebas contundentes de lo contrario.

Tal imprecisión científica es entendible. Lo que no se entiende es que hoy en día, cuando el hombre ya ha ido al espacio para comprobar que la tierra es un objeto insignificante en la inmensidad del universo concido, siga habiendo gente que insista en esa idea de "cielo y tierra".

Así ocurre con otras tantas afirmaciones de los libros bases de las religiones. El dogma es un enemigo de la posibilidad del hombre para trascender como especie. Las personas dogmáticas jamás, ni siquiera en la presencia de evidencia contundente, aceptarán una visión de la realidad diferente a la que se han formado a partir de la interpretación literal de cosas que fueron escritas hace miles de años.

Al igual que los dogmáticos no tienen como comprobar que sus ideas son correctas (aunque ellos creen que sí porque, entre otras cosas, se valen de la evidencia circunstancial y la superchería para pretender validar sus afirmaciones), los científicos tampoco tienen la última palabra ya que es una verdad histórica que la ciencia (desde sus incipientes inicios con la alquimia) y sus paradigmas están en constante evolución en la medida que el hombre acceda a nuevas realidades.

Siempre me ha parecido gracioso como los dogmáticos aceptan sin dudar la, según el nuevo testamento, afirmación de Jesus: "Mi reino no es de este mundo", pero rechazan de plano la inferencia, por demás lógica, que Jesús era un ser extraterrestre...

En esta tónica las posiciones de uno y otro punto de vista son evidentemente irreconciliables. Lo que sí es una verdad que nadie puede negar así quiera, es que los diferentes cultos, unos más que otros, se han lucrado económicamente y han mantenido una posición de poder en la sociedad a través del chantaje que esclaviza moralmente a los adeptos más radicales o tal vez, más ignorantes.

Saludos =)
 
Ivancho dijo:
En la época que se escribió la biblia se hablaba de "cielo y tierra" como los dos elementos preponderantemente opuestos. Eso se daba producto del punto de vista del hombre de la época, quien no había salido de nuestra atmósfera para comprobar que esa apreciación era absolutamente errada y viciada de la ignorancia o más bien, ausencia de tecnología que le permitiese acceder a pruebas contundentes de lo contrario.

Tal imprecisión científica es entendible. Lo que no se entiende es que hoy en día, cuando el hombre ya ha ido al espacio para comprobar que la tierra es un objeto insignificante en la inmensidad del universo concido, siga habiendo gente que insista en esa idea de "cielo y tierra".

Así ocurre con otras tantas afirmaciones de los libros bases de las religiones. El dogma es un enemigo de la posibilidad del hombre para trascender como especie. Las personas dogmáticas jamás, ni siquiera en la presencia de evidencia contundente, aceptarán una visión de la realidad diferente a la que se han formado a partir de la interpretación literal de cosas que fueron escritas hace miles de años.

Al igual que los dogmáticos no tienen como comprobar que sus ideas son correctas (aunque ellos creen que sí porque, entre otras cosas, se valen de la evidencia circunstancial y la superchería para pretender validar sus afirmaciones), los científicos tampoco tienen la última palabra ya que es una verdad histórica que la ciencia (desde sus incipientes inicios con la alquimia) y sus paradigmas están en constante evolución en la medida que el hombre acceda a nuevas realidades.

Siempre me ha parecido gracioso como los dogmáticos aceptan sin dudar la, según el nuevo testamento, afirmación de Jesus: "Mi reino no es de este mundo", pero rechazan de plano la inferencia, por demás lógica, que Jesús era un ser extraterrestre...

En esta tónica las posiciones de uno y otro punto de vista son evidentemente irreconciliables. Lo que sí es una verdad que nadie puede negar así quiera, es que los diferentes cultos, unos más que otros, se han lucrado económicamente y han mantenido una posición de poder en la sociedad a través del chantaje que esclaviza moralmente a los adeptos más radicales o tal vez, más ignorantes.

Saludos =)
Viej .. sin llegar a ser un poco spamer digo: que post tan bueno, muy bien dicho!
 

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