Yo, por mi parte, no estoy de acuerdo con la reelección del presidente por las siguientes razones:
1) ¿Que mensaje le damos a las generaciones futuras? ¿Si las leyes no dejan que hagas lo que quieras... cámbialas? Cualquier persona se da cuenta de los esfuerzos extraordinarios que hizo el gobierno para promover la reelección presidencial, y las rabietas de los partidos uribistas con el gobierno desde el 20 de julio obedecen a una sencilla razón: no pocos congresistas de la bancada uribista se sienten utilizados de forma sistemática y constante por el ejecutivo, el cual espera de ellos total lealtad. Los pocos congresistas uribistas que aún creen en el juego transparente de la democracia, donde las ideas y el poder del voto priman sombre la intriga y el tráfico de influencias, están saltando por la borda. La lección de que el fin justifica los medios no es una que le quiero enseñar a mis hijos.
2) No son pocas las victorias que ha acumulado el gobierno en la lucha contra el terrorismo, pero decir que son victorias que sólo el gobierno uribe puede lograr, es ignorar de forma grosera que:
*los soldados y policias rasos son los que están el el monte enfrentando la los grupos armados
*los pilotos de la fuerza aérea y aviación del ejército son los que ejecutan los planes de batalla modernos, moviendo personal y haciendo llover bala
*los comandantes a todos los niveles son los que deciden tanto la táctica y la estrategia en base a la información disponible y las condiciones del teatro de operaciones
en ese caldo, el ejecutivo no es el que está peleando la guerra donde importa -en el campo de batalla-, sólo autoriza operaciones grandes, y obviamente se lleva el mayor crédito ante los medios y la opinión. Si la lluvia de plata que es el plan de seguridad democrática le gusta al elector, hay muchos en el mercado que están felices de mantenerlo, pues es una maquinita de hacer puntos en las encuestas. Cambiar de presidente no va a hacer que a los soldados les falle la puntería, la habilidad al piloto o el criterio al general. Desde un principio, el problema de las fuerzas militares ha sido de plata . Plata para armas, plata para entrenamiento, plata para aviones, para comunicaciones y para meterle más soldados a la fuerza; y de eso se dio cuenta Pastrana cuando quedó como un petardo ante la historia con el fiasco del Caguán. Al fin y al cabo, él fue quien convenció a su amiguis Clinton para que le comenzara a dar plata ventiada, con el fin de hacer que el ejército de risa que había antes fuera lo que es hoy.
3) Se me hace sencillamente ridícula la idea de que el sistema educativo colombiano no haya sido capaz de producir sino a una persona que sirva para el trabajo de presidente de entre hordas y hordas de gente capaz, diligente y honesta. Obviamente, si uno dice que toca escoger entre samuel, piedad y navarro, pues chao. Ahí tienen a Santos, a Pardo, a Fajardo, a Noemí, a Peñalosa, a Mockus, a Vargas Lleras y a otra candidad de personas que saben que la gente va a esperar ciertas cosas de ellos, pues Uribe le mostró a muchos electores mucho -no todo, pero ajá- de lo que puede hacer un presidente. Todos estos posibles candidatos y muchos más, tienen cosas buenas y malas, igual que uribe.
4) lamentablemente, una de las cosas más malas que ha dejado este gobierno es el aire de intolerancia horrible que ha permeado la opinión pública. Uno ve en cuanto foro de periódico por ahí que hay quienes felizmente verían morir a media colombia antes de que el país cambie de manos. O quienes equiparan a quien piense diferente con el peor asesino. Y no es gratuito. Si Uribe felizmente tacha de terrorista y criminal a quien no le diga que sí señor, ¿cómo no se va a ver que es una conducta aceptable? la nuestra es una sociedad influenciada por los medios, y si Uribe está dispuesto a desprestigiar a quien se le cruce en el camino, para luego retractarse en notitas en el último rincón de presidencia.gov.co, le está diciendo a la ciudadanía y sobre todo a sus partidarios que el mundo se divide en dos, que los criminales son los que no piensan igual y que Dios es uribista.
5) No puedo estar feliz de que el presidente sea alguien que no responde con sí o con no a las preguntas difíciles, sino que como siempre, bota estádísticas del gobierno, habla de montañas de datos que no van al grano y se saca de taquito la curiosidad del periodista con un chascarrillo o un discurso moralizante. No hay entrevista seria en la que no haga lo mismo, y los periodistas más veteranos saben cuando no insistir más porque conocen la estructura de sus manibras evasivas a la perfección. Si es así frente a los medios, ¿que se puede esperar a puerta cerrada?
6) Finalmente y lo que más me molesta, es que el presidente se esmere en poner a cuanto muñeco encuentre en todas las ramas del poder público para que no cuestionen al gobierno y lo hagan ver sus problemas. ¿El director del DANE estaba mostrando que el desempleo estaba en aumento hace como dos años? pues lo sacamos y ahora el DANE cuenta vender dulces en un semáforo como empleo. ¿La corte constitucional estaba que molestaba con eso de lo derechos humanos y laborales? pues armamos una terna con robots uribistas y asunto arreglado ¿el fiscal Iguarán está husmeando donde no debe,como en el DAS, las notarías y los congresistas clave del gobierno? pues armemos otra terna, esta vez con dos de mis amigos más cercanos, y como tercer candidato pongamos a una mujer que esencialmente no sabe a que va para que la descarten de una. Los casos siguen y siguen. Al menos debería ser más honesto con sus intenciones y dar un autogolpe, para quedarse con todo el poder. Al menos no perdería tiempo y plata manipulando el sistema para que todos hagan exactamente lo que él quiere.
Que pena explayarme tanto, pero decir que no quiero que lo reelijan porque no me gusta no es consecuente con lo que pienso del gobierno, bueno y malo. Solo que pienso que lo bueno no es exclusivo de su gobierno y se puede mantener con muchos otros posibles presidentes, pero mucho de lo malo, lamentablemente, es consecuencia de su forma de ver las cosas y a las personas.
1) ¿Que mensaje le damos a las generaciones futuras? ¿Si las leyes no dejan que hagas lo que quieras... cámbialas? Cualquier persona se da cuenta de los esfuerzos extraordinarios que hizo el gobierno para promover la reelección presidencial, y las rabietas de los partidos uribistas con el gobierno desde el 20 de julio obedecen a una sencilla razón: no pocos congresistas de la bancada uribista se sienten utilizados de forma sistemática y constante por el ejecutivo, el cual espera de ellos total lealtad. Los pocos congresistas uribistas que aún creen en el juego transparente de la democracia, donde las ideas y el poder del voto priman sombre la intriga y el tráfico de influencias, están saltando por la borda. La lección de que el fin justifica los medios no es una que le quiero enseñar a mis hijos.
2) No son pocas las victorias que ha acumulado el gobierno en la lucha contra el terrorismo, pero decir que son victorias que sólo el gobierno uribe puede lograr, es ignorar de forma grosera que:
*los soldados y policias rasos son los que están el el monte enfrentando la los grupos armados
*los pilotos de la fuerza aérea y aviación del ejército son los que ejecutan los planes de batalla modernos, moviendo personal y haciendo llover bala
*los comandantes a todos los niveles son los que deciden tanto la táctica y la estrategia en base a la información disponible y las condiciones del teatro de operaciones
en ese caldo, el ejecutivo no es el que está peleando la guerra donde importa -en el campo de batalla-, sólo autoriza operaciones grandes, y obviamente se lleva el mayor crédito ante los medios y la opinión. Si la lluvia de plata que es el plan de seguridad democrática le gusta al elector, hay muchos en el mercado que están felices de mantenerlo, pues es una maquinita de hacer puntos en las encuestas. Cambiar de presidente no va a hacer que a los soldados les falle la puntería, la habilidad al piloto o el criterio al general. Desde un principio, el problema de las fuerzas militares ha sido de plata . Plata para armas, plata para entrenamiento, plata para aviones, para comunicaciones y para meterle más soldados a la fuerza; y de eso se dio cuenta Pastrana cuando quedó como un petardo ante la historia con el fiasco del Caguán. Al fin y al cabo, él fue quien convenció a su amiguis Clinton para que le comenzara a dar plata ventiada, con el fin de hacer que el ejército de risa que había antes fuera lo que es hoy.
3) Se me hace sencillamente ridícula la idea de que el sistema educativo colombiano no haya sido capaz de producir sino a una persona que sirva para el trabajo de presidente de entre hordas y hordas de gente capaz, diligente y honesta. Obviamente, si uno dice que toca escoger entre samuel, piedad y navarro, pues chao. Ahí tienen a Santos, a Pardo, a Fajardo, a Noemí, a Peñalosa, a Mockus, a Vargas Lleras y a otra candidad de personas que saben que la gente va a esperar ciertas cosas de ellos, pues Uribe le mostró a muchos electores mucho -no todo, pero ajá- de lo que puede hacer un presidente. Todos estos posibles candidatos y muchos más, tienen cosas buenas y malas, igual que uribe.
4) lamentablemente, una de las cosas más malas que ha dejado este gobierno es el aire de intolerancia horrible que ha permeado la opinión pública. Uno ve en cuanto foro de periódico por ahí que hay quienes felizmente verían morir a media colombia antes de que el país cambie de manos. O quienes equiparan a quien piense diferente con el peor asesino. Y no es gratuito. Si Uribe felizmente tacha de terrorista y criminal a quien no le diga que sí señor, ¿cómo no se va a ver que es una conducta aceptable? la nuestra es una sociedad influenciada por los medios, y si Uribe está dispuesto a desprestigiar a quien se le cruce en el camino, para luego retractarse en notitas en el último rincón de presidencia.gov.co, le está diciendo a la ciudadanía y sobre todo a sus partidarios que el mundo se divide en dos, que los criminales son los que no piensan igual y que Dios es uribista.
5) No puedo estar feliz de que el presidente sea alguien que no responde con sí o con no a las preguntas difíciles, sino que como siempre, bota estádísticas del gobierno, habla de montañas de datos que no van al grano y se saca de taquito la curiosidad del periodista con un chascarrillo o un discurso moralizante. No hay entrevista seria en la que no haga lo mismo, y los periodistas más veteranos saben cuando no insistir más porque conocen la estructura de sus manibras evasivas a la perfección. Si es así frente a los medios, ¿que se puede esperar a puerta cerrada?
6) Finalmente y lo que más me molesta, es que el presidente se esmere en poner a cuanto muñeco encuentre en todas las ramas del poder público para que no cuestionen al gobierno y lo hagan ver sus problemas. ¿El director del DANE estaba mostrando que el desempleo estaba en aumento hace como dos años? pues lo sacamos y ahora el DANE cuenta vender dulces en un semáforo como empleo. ¿La corte constitucional estaba que molestaba con eso de lo derechos humanos y laborales? pues armamos una terna con robots uribistas y asunto arreglado ¿el fiscal Iguarán está husmeando donde no debe,como en el DAS, las notarías y los congresistas clave del gobierno? pues armemos otra terna, esta vez con dos de mis amigos más cercanos, y como tercer candidato pongamos a una mujer que esencialmente no sabe a que va para que la descarten de una. Los casos siguen y siguen. Al menos debería ser más honesto con sus intenciones y dar un autogolpe, para quedarse con todo el poder. Al menos no perdería tiempo y plata manipulando el sistema para que todos hagan exactamente lo que él quiere.
Que pena explayarme tanto, pero decir que no quiero que lo reelijan porque no me gusta no es consecuente con lo que pienso del gobierno, bueno y malo. Solo que pienso que lo bueno no es exclusivo de su gobierno y se puede mantener con muchos otros posibles presidentes, pero mucho de lo malo, lamentablemente, es consecuencia de su forma de ver las cosas y a las personas.