Cuidado con esas Targetas
DirecTV, una de las dos empresas de televisión por cable de Estados Unidos, ha acabado con las famosas tarjetas piratas que permitían acceder a toda la programación. DirecTV empezó sus emisiones hace más de 4 años. Por aquel entonces, la tecnología de las "tarjetas inteligentes", que guardan información sobre el contrato del usuario en su interior y participan en la descodificación de la señal aunque no pueden enviar información de vuelta a la emisora, estaba en pañales y DirecTV apostó por ella. Por supuesto, había fallos en el diseño y pronto la comunidad hacker inventó maneras de engañar a los receptores. Desde entonces, DirecTV y la creciente comunidad de hackers han estado librando una batalla similar a que hemos comentado en BarraPunto antes. DirecTV mandaba actualizaciones a las tarjetas y los hackers tardaban 15 minutos en actualizarlas con sus grabadoras. Y así, hasta que desde hace dos años, casi toda la iniciativa de la plataforma era perseguir las webs que discutían la tecnología e intentar acabar con ellas usando su equipo legal. La batalla parecía totalmente ganada por los hackers... Pero hace cuatro meses, DirecTV empezó a mandar varias actualizaciones de golpe y semanalmente, y aunque los hackers seguían manteniendo el ritmo, estaban bastante intrigados por el cambio de estrategia, las actualizaciones nunca habían llegado juntas ni tan a menudo. La mayoría postulaba que DirecTV simplemente estaba jugando con ellos, símplemente les estaba dando mucho trabajo. Estas actualizaciones contenían código de ordenador sin sentido aparente, pero que necesitaba estar presente en las tarjetas para que estas funcionasen, así que los hackers se dedicaron a parchear su software, incluyendo este código. Por fín llegó la última oleada de actualizaciones, y por fín los hackers comprendieron qué estaba tramando DirecTV. La última actualización sirvió para juntar el código aparentemente inservible, que se convirtió en un programa dinámico, que reemplazaba al viejo e indefenso software de la emisora. La comunidad comprendió que ahora DirecTV tenía un sistema mucho más potente, pero todavía se podía evitar y recibir la señal, pero no todo acababa ahí. El Domingo, a las 20 horas de allí, DirecTV apretó el gatillo de su nueva arma. Una semana antes de la Super Bowl, el programa más visto del año en Estados Unidos, DirecTV lanzó el ataque final, y mediante una serie de nuevas actualizaciones que usaban el nuevo sistema, mandaron señales que buscaban tarjetas pirata y las destruía. Se calcula que esa noche el 98% de los usuarios de estas tarjetas perdió la suya en el ataque, dejandolos sin señal en la televisión. La guinda del pastel es que los primeros 8 bytes de las tarjetas destruídas llevaban la firma de DirecTV: "GAMEOVER".