Confieso que estoy decepcionado de alguien que supuestamente era mi amiga. Se graduó ayer y apenas me enteré hoy de pura casualidad por otra persona. Me hubiera gustado estar presente, verla feliz recibiendo tan merecido título, o al menos haber estado en la reunión que hizo después. Invitó a un montón de gente (hasta gente que ni conozco) pero ella ni se acordó de mí ni para decirme gracias.
Como siempre, es mejor no esperar nada de nadie. En esta época la amistad vale menos que un moco.
Como siempre, es mejor no esperar nada de nadie. En esta época la amistad vale menos que un moco.